Fue un error permitir la existencia de áreas para fumar en lugares públicos. La Ley General para el Control del Tabaco no se cumple, principalmente por el costo de la inversión que deben realizar los restaurantes –de 100 mil a 200 mil pesos– para garantizar la protección a los no fumadores, aseguró Mauricio Hernández Ávila, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.

Al participar en la presentación de la encuesta mundial sobre tabaco, el funcionario informó que la Secretaría de Salud (Ssa) ya trabaja en un proyecto de reforma a la ley, a fin de homologarla con la que está vigente en el Distrito Federal y lograr que no se permita la existencia de áreas para fumadores en espacios públicos.

Reconoció que en época de crisis económica es difícil lograr que los empresarios inviertan para cumplir con la ley y su reglamento, lo que además genera una competencia desleal en perjuicio de quienes se han apegado a la normatividad. Por eso, insistió, es importante seguir el ejemplo del Distrito Federal para hacer todos los espacios públicos libres de humo de tabaco.

El reglamento de la ley antitabaquismo determina las características que deben reunir las áreas para fumadores, entre otros, los filtros de aire, las puertas y su mecanismo de apertura y cierre, y aunque la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha clausurado las áreas de los establecimientos que incumplen con la legislación, tampoco es posible el cierre total del inmueble; no obstante, sería muy difícil, con la crisis, cerrar por tres meses un restaurante, indicó.

Con la finalidad de preparar el proyecto de reforma a la ley que entró en vigor en agosto de 2008, la Ssa está en el proceso de recuperar experiencias, dijo Hernández Ávila.

Con ese fin, funcionarios de la dependencia se han reunido con la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera, indicó.