El PRI prepara ya un escenario de inestabilidad, violencia e intimidación para tratar de mantener los gobiernos estatales que ahora encabeza y estarán en disputa el próximo 4 de julio, advirtieron los dirigentes nacionales de PRD, PAN, PT y Convergencia.

En conferencia de prensa conjunta, adelantaron que convocarán a observadores nacionales y extranjeros para que den cuenta de esas irregularidades, así como del previsible desvío de recursos públicos y rebase de topes de campaña que ha caracterizado a las administraciones del tricolor.

Después de la realización de un foro en el que se discutió sobre las razones que llevaron a partidos antagónicos a formar alianzas para varios procesos electorales, se interrogó a los dirigentes del PRD, Jesús Ortega, y del PAN, César Nava, acerca de las declaraciones de la dirigente del PRI, Beatriz Paredes, de que una coalición le hace los mandados.

El tamaño de la reacción del PRI ante el avance de la alianza que integran PAN, PRD, PT y Convergencia, respondió Nava, es proporcional a su preocupación y a su miedo.

Ortega Martínez lamentó el bajo nivel político de las declaraciones de Paredes Rangel, y aseveró que ese tono no será utilizado por la alianza.

Acompañados por Gabino Cué, su candidato al gobierno de Oaxaca, y Xóchitl Gálvez, precandidata a la gubernatura de Hidalgo, ambos dirigentes criticaron que el PRI pretenda condenar la alianza y defienda lo indefendible.

Mencionaron el caso de Oaxaca y la toma de protesta del candidato del tricolor, Eviel Pérez Magaña.

Llegó arropado por una movilización pagada, el acarreo típico de los actos priístas durante más de 80 años, y de esa manera buscan sostener lo insostenible. El PRI defiende a un gobernador conocido en el país por sus altos niveles de corrupción, por su autoritarismo y su aparato represor, y por mantener al estado de Oaxaca sumido en el último lugar nacional en los indicadores relevantes, lo mismo que pasa en Hidalgo, apuntó Nava.

Interrogados sobre la cantidad de recursos que destina el tricolor en cada campaña, Ortega recordó que hay un juicio político pendiente en el Congreso de Oaxaca contra el actual gobernador por el uso de recursos públicos.

“Pongo este ejemplo porque no vamos a permitir que los gobiernos en Hidalgo, en Oaxaca y en otras entidades, donde están acostumbrados a hacer uso ilegal de recursos públicos, lo hagan hoy. Vamos a llamar a la observación nacional e internacional. Vamos a recurrir a todas las instancias para que no se sobrepasen los topes de campaña, no se utilicen recursos públicos para beneficiar a candidatos.

Van a encontrar la resistencia de todos nosotros para evitar que repitan el latrocinio de utilizar recursos públicos para beneficiar a candidatos de su partido, advirtió.

En la conferencia también participaron Alberto Anaya, dirigente del PT, y Luis Walton, de Convergencia.

Antes, el coordinador del Diálogo para la Reconstrucción de México, Manuel Camacho Solís, justificó la validez y la necesidad de las alianzas, porque son las únicas que pueden garantizar una competencia electoral.

“Nuestro dilema estratégico no era hacer o dejar de hacer alianzas por razones ideológicas. Nuestro dilema era competir o tener participaciones anodinas. Si nuestros candidatos ganan, se romperá la regla de oro sobre la que se basa el poder autoritario: el nombramiento del sucesor; que es el equivalente contemporáneo de la relección porfirista.

Pero aun si no se gana en todos los estados, de cualquier manera se habrán afectado los equilibrios políticos locales en favor de la democracia y la rendición de cuentas. Con las alianzas y con estos candidatos se puede ganar y, mejor aún, se podrá gobernar de otra manera, aseveró Camacho Solís.