Este lunes reiniciarán clases más de 25 millones de alumnos de educación básica en el país, una semana antes de que se aplique en 133 mil escuelas primarias y secundarias la Evaluación Nacional del Logro Académico en los Centros Escolares (Enlace) prueba con la que se calificará a 15.7 millones de estudiantes de tercero a sexto de primaria y de los tres grados de secundaria en español, matemáticas e historia.

Profesores de estos niveles educativos afirmaron que por quinto año consecutivo se convoca a un fraude escolar. Miles de maestros están obligados a participar en el acto de simulación más vergonzoso del sistema educativo nacional, de acuerdo con Víctor Manuel Equihua, secretario de organización del magisterio disidente en la sección 10 del Distrito Federal.

Se ha llegado al exceso de aplicar hasta tres pruebas ensayo, sólo para garantizar que el alumno sepa contestar correctamente el examen, pero de un modo mecánico, no por profundizar en sus conocimientos. En los estados, agregó, “se establecieron metas mínimas de puntaje –como el programa Vamos por los 600, aplicado en la capital del país, como si eso fuera la meta más trascendente de Enlace”.

Nadie sabe qué se evalúa

El cuestionario de opción múltiple divido en cuardenillos por asignatura se aplicará en la Semana Nacional de Evaluación –del 19 al 23 de abril–, cuando, indicó Equihua, ya se ensayó hasta la saciedad cómo responder mecánicamente una prueba estandarizada que por su diseño no puede leer las asimetrías tan grandes que se presentan en las escuelas mexicanas.

Por su parte, Pedro Ramírez Vázquez, secretario general del magisterio disidente de la sección 36 del valle de México, enfatizó que la propia comunidad académica y de especialistas en el sistema educativo ha cuestionado de forma crítica y con argumentos sólidos, la validez técnica de la prueba. Nadie sabe qué estamos evaluando. Si se busca tener un diagnóstico preciso sobre si un alumno aprende en clase todo lo que se supone debe saber, ¿porque tanto ensayo? Los niños no son tontos y están cansados de tanto examen.

A diferencia de 2009, cuando se interrumpió la aplicación de Enlace en todo el país debido al virus de la influenza A/H1N1, una gran cantidad de profesores pusimos en duda su utilidad; ahora hay la certidumbre de que sólo se busca un objetivo: salir bien en los puntajes, recibir un estímulo y mandar al cajón de la basura la prueba, agregó.

Asimismo, los maestros entrevistados, quienes tienen más de 25 años de práctica docente, destacaron que el lunes 12 de abril, los más de 1.5 millones de profesores de prescolar, primaria y secundaria en todo el país enfrentaremos un duro regreso a clases. Desde el primer día vamos contrarreloj, pues después de Enlace siguen las festividades de mayo; en junio continúan las evaluaciones finales, dos semanas de julio, y luego todo se acabó, aunque no se cumpla con el programa curricular.