Al contrario de la afirmación del titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guillermo Galván, de que el Ejército seguirá de cinco a 10 años más en las calles, los grupos parlamentarios en la Cámara de Senadores elaboran una nueva ley que prevé el regreso de los militares a los cuarteles, y normas para que a futuro puedan participar de manera temporal en el combate al narcotráfico, bajo condiciones específicas.

Se plantea que el Ejército sólo actuará en auxilio de las autoridades civiles que hayan solicitado su intervención, y se requerirá el aval del Senado y del Consejo de Seguridad Nacional. Además, en caso de violaciones a derechos humanos, las tropas estarán sujetas a leyes del fuero común, no al militar.

Las afirmaciones del general Galván fueron rechazadas por senadores de PRI y PRD. El coordinador de los legisladores priístas, Manlio Fabio Beltrones, advirtió que nunca legalizarán que el Ejército siga 10 años más en tareas policiacas, y menos en las circunstancias actuales, con hechos tan lamentables como la muerte de dos niños en Tamaulipas, a los que se suman otras bajas de civiles en operativos contra bandas criminales.

Confirmó que va muy avanzado el dictamen sobre la ley de seguridad nacional, en la que se incluye legalizar la presencia de militares en operativos contra la delincuencia organizada, pero no de manera permanente.

Adelantó que la nueva ley prevé que el Senado avale las solicitudes del presidente de la República para desplegar fuerzas armadas en alguna región, una vez que el Consejo de Seguridad Nacional lo haya hecho, luego de una solicitud expresa de las autoridades locales que “estimen necesaria la incursión de apoyo de los militares.

Beltrones agregó que otras condiciones para que militares participen en la lucha antinarco es que se sujeten al mando del orden que solicite el apoyo y que estén sujetos a las leyes del fuero civil, no del militar.

El priísta Francisco Labastida dijo que en caso de situación muy grave, el Ejército podrá participar como auxiliar; así lo indica el artículo 29 constitucional, para apoyar a la autoridades constituidas en la lucha contra la violencia y la inseguridad.

El presidente del Senado, Carlos Navarrete, dijo que no está de acuerdo con lo expresado por el titular de la Sedena: no se debe prolongar el tiempo en que el Ejército siga supliendo a la Policía Federal, porque el deterioro de las fuerzas armadas es mucho y nadie puede apostar a erosionarlas más.

Agregó que se avanza en esa ley, que dará plena legalidad a la acción temporal del Ejército en tareas de seguridad pública.

El senador priísta Jesús Murillo Karam sostuvo que se espera que en los próximos días esté listo el dictamen de la ley de seguridad nacional propuesta por Felipe Calderón.

Beltrones aclaró que de esa iniciativa se eliminaron aspectos que hacían posibles violaciones a las garantías constitucionales.

Agregó que discutirán el tema con el general Galván el próximo lunes, cuando éste y los integrantes del gabinete de seguridad nacional acudan al Senado.

Le preguntaremos cuál es la razón por la que pide un plazo de 10 años, y no cinco o 20, y en qué sustenta esa posición.