La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) aseguró que los obispos no son encubridores de pederastia clerical y están dispuestos a que los abusos salgan a la luz; esa es la instrucción. Hizo hincapié en que esto no significa que puedan dar a conocer situaciones con base en rumores, sospechas o desquites, porque se podría destruir la vida de una persona.

Manuel Corral Martín, secretario ejecutivo de relaciones públicas e institucionales de la CEM precisó, en entrevista, que si antes en la curia había sigilo en torno a estos temas, ahora no, por ello aseguró que los obispos están dispuestos a dar informes al respecto, siempre y cuando haya denuncia formal y pruebas, no casos que estén basados en calumnias o especulación.

Aseguró que en el caso de México la CEM y todas las diócesis rechazan el sigilo, se ha dicho claramente que en la nueva cultura que vivimos no cabe el sigilo, porque cuando se viola el derecho de una persona hay que denunciar y la Iglesia lo está haciendo; comenzó en Estados Unidos y ahora lo hace en otras partes.

Descartó que pese a esta apertura, la CEM pueda conminar a las diócesis y arquidiócesis para que le entreguen los datos que tengan al respecto para elaborar un registro de la situación a escala nacional, pues esa labor no está entre sus facultades.

Detalló que sería más factible que cada obispo y arzobispo diera detalles de lo que acontece en relación a este tema en su zona.

–¿Entonces, para tener un panorama nacional podría consultarse a cada uno de los obispos?

–Habría que ir con cada obispo y preguntarle, y él tiene que ver con sus organismos diocesanos la situación. Si hay un caso de pederastia en su diócesis y hay denuncia, eso sería público. Pero no van a dar datos con base en rumores; hay muchas veces que son acusaciones para perjudicar a la persona, ha habido ataques a sacerdotes que no tienen nada que ver en el asunto y es sólo para desprestigiarlos. En esto hay calumnias y desquites, con rumores no puedes condenar a nadie, eso sería destruir a la persona.

Al ser cuestionado sobre el señalamiento hecho al papa Benedicto XVI sobre que ocultó casos de pederastia, Corral argumentó que ahora es otra época, hace 40 o 50 años no se había dado un cambio cultural que lleva consigo la libre expresión y manifestación de las ideas e insistió en que si había sigilo en este rubro era porque las circunstancias y la mentalidad eran diferentes.

Ya basta de pegarle al Papa, él ha sido valiente y es el que más ha hecho para transparentar estas circunstancias; detrás de esto hay mano negra, hay gato encerrado, consideró.