Ante la grave situación de violencia en Ciudad Juárez, México y Estados Unidos operarán un programa piloto conjunto que ayude al gobierno mexicano a confrontar y revertir la inseguridad en esa urbe fronteriza. El enfoque será mejorar los esquemas de inteligencia, dar capacitación especializada a elementos policiales y fuerzas armadas (en casos de narcotráfico, extorsión y secuestro) y poner énfasis en programas sociales.

Diez días después del asesinato de tres personas ligadas al consulado estadunidense en aquella ciudad chihuahuense, el tema fue analizado durante la segunda Reunión del Grupo de Alto Nivel México-Estados Unidos sobre la Iniciativa Mérida.

Este esquema bilateral fue concebido en 2007 como un esfuerzo multianual de mil 400 millones de dólares para el desmantelamiento de los cárteles del narcotráfico; sin embargo, no se precisó el monto que se destinará a este programa piloto que busca avanzar en un modelo de dominio de inteligencia guiado por un grupo de expertos y la presencia de tiempo completo, en aquella zona, de un asesor técnico.

Durante una conferencia conjunta con la canciller Patricia Espinosa, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, manifestó su pesar por la muerte de las personas ligadas al consulado estadunidense en Juárez: Hemos presenciado con mucho dolor terribles tragedias, homicidios que han sucedido aquí en México y nuestros corazones explotaron en llanto por los homicidios en Juárez que cobraron tres vidas de personas relacionadas con nuestro consulado, expresó.

Estos hechos, dijo, fueron un terrible recordatorio, el más reciente, de lo mucho que tenemos que hacer juntos y lo importante que son estas reuniones para sintonizar la labor para combatir la amenaza de esta red criminal trasnacional. Clinton agregó que ambas naciones trabajan juntas para llevar a los asesinos ante la justicia.

La canciller Espinosa dijo que existe un genuino interés compartido por que la cooperación bilateral arroje resultados tangibles lo antes posible y, en el contexto de la estrategia Todos somos Juárez, se impulsen acciones tanto de seguridad como en aspectos socioeconómicos.

La lucha contra la violencia fronteriza en Ciudad Juárez prevé un plan anticorrupción, reformas legales e incluso una estrategia sustentada en un programa canino. En este último punto, Estados Unidos ofrece 60 perros entrenados para detectar droga, dinero y armas; además, se dará capacitación y equipo para aumentar la capacidad de las unidades caninas de la Policía Federal.

El programa se crea a partir de las reuniones binacionales en Ciudad Juárez y El Paso, Texas, en enero y febrero pasados. El objetivo es apoyar a las autoridades mexicanas mediante entrenamiento, equipo e intercambios profesionales de información.

Entre las líneas generales del programa piloto se pondrá en funcionamiento un proceso automatizado en el Centro de Respuesta Inmediata para llamadas de emergencia y denuncias anónimas dentro de un tiempo definido, así como una red de comunicaciones seguras entre policías de los tres niveles de gobierno y el Ejército Mexicano.

También, entrenamiento de las policías estatal y municipal a partir de un nuevo currículum nacional estandarizado y cambios a los sistemas correccionales. El plan incluye esquemas de control de confianza para las corporaciones policiacas que operen en esa urbe y brindar asesores en materia forense y de entrenamiento judicial. Dentro del plan social se incluye reducir la demanda de drogas, promover cultura de respeto a la ley y fomentar la participación ciudadana.