El incremento en las tarifas de agua tiene impacto económico en las familias capitalinas, pero será mayor si nos quedamos sin ella y esa posibilidad existe, señaló el secretario de Finanzas, Mario Delgado al exhortar a los contribuyentes a no dejarse engañar con promesas de amparo, pues corren el riesgo de que se les corte el suministro y al final tendrán que pagar.

Dijo que la ciudad de México sigue teniendo el agua más barata del país, y la meta es reducir su consumo 20 por ciento y contar con recursos adicionales para mejorar la infraestructura hidráulica y de drenaje, reparar fugas y colocar 400 mil medidores.

Dijo que los ciudadanos que tengan alguna duda con el cobro podrán acudir a los módulos de atención en las administraciones tributarias, pues ahí anda un grupo político queriendo amparar a la gente y va a meterla en problemas, porque se trata de un asunto que puede llevar de dos a tres años, en los cuales van a estar sin agua.

Por separado, la jefa delegacional de Iztapalapa, Clara Brugada, anticipó que enviará a la Asamblea Legislativa una iniciativa de ley para garantizar la equidad en la distribución del recurso. Expuso que el consumo per cápita en la ciudad es desigual, pues mientras medio millón de habitantes de esta demarcación reciben el líquido una vez a la semana, en Miguel Hidalgo una sola persona utiliza 600 litros diarios.

En otro orden, dirigentes del Partido de la Revolución Democrática en la capital calificaron de demagógica la campaña que ayer inició el director de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Luege Tamargo, consistente en regalar cubetas a la población, pues, aseguraron, sólo busca posicionar su imagen para obtener la candidatura del PAN a la jefatura de Gobierno del Distrito Federal.