Ciudad Juárez, Chih., 21 de marzo. Cuando estaba en el umbral del precipicio, por fin reaccionó Indios y terminó con una larga racha de 27 partidos sin triunfo. A pesar de fallar un penal, la anotación de Daniel Frías significó una inyección de vida para los jugadores de la Tribu, que dieron cuenta 1-0 del Queréraro, y renovaron la esperanza de mantenerse en el máximo circuito.

El Maleno Frías anotó al minuto 39 el solitario tanto del choque, disputado en el estadio Olímpico Benito Juárez, que regaló una anhelada alegría al público. Así, el conjunto de Ciudad Juárez llegó a seis puntos, para seguir como sotanero del grupo uno, pero mejoró su cociente en 0.8709, producto de 54 puntos en 62 partidos.

Indios terminó con el viacrucis de duelos sin ganar, empero, desperdició muchas oportunidades, incluido un penal fallado por Juan de la Barrera, el cual le costó la tarjeta roja al portero de los Gallos, Carlos Bossio, por una falta dentro del área sobre Edwin Santibáñez.

El comienzo del encuentro resultó prometedor para el cuadro fronterizo, que durante la primera mitad se cansó de llegar con peligro al área y de desaprovechar claras opciones de gol, mismas que le hubieran valido para llevarse una victoria más holgada.

Daniel Frías, Edwin Santibáñez y Alain Nkong fueron los artífices del juego ofensivo del conjunto norteño; sin embargo, los goles no llegaban por la precipitación y ansiedad con que los atacantes buscaban anotar.

Era el minuto 23 cuando Emil Martínez sacó un disparo con potencia y Bossio soltó el balón, pero cuando Santibáñez iba al contrarremate, el arquero del Querétaro lo derribó dentro del área y se decretó la pena máxima, así como la expulsión del guardameta.

No obstante, y luego de que nadie se animaba a cobrar desde los 11 pasos, otro gesto de inseguridad en que han caído los delanteros de la Tribu, el defensa Juan de la Barrera aceptó el reto, pero su envío se estrelló en el travesaño.

El público se mostró desencantado e incrédulo, y apesadumbrado el equipo dirigido por Gabino Amparán retomó el juego, pero la nefasta suerte comenzó a cambiar.

Al minuto 33, Guadalupe Martínez, quien entró para cubrir la expulsión de Bossio, hizo una mala salida, dejó el balón a la deriva y Emil Martínez disparó con potencia, pero sobre la raya Rodrigo Íñigo evitó la caída de su arco.

Con una persistencia y fe que pocas veces había mostrado, Indios insistió al frente, y al 37 llegó el gol por conducto de Daniel Frías, quien alcanzó a estirar la pierna para empujar un buen servicio de Tomás Campos desde la banda izquierda.

Para el complemento se esperaba a una Tribu con el mismo ritmo, tiradA al frente buscando al menos un gol más que le diera la tranquilidad definitiva, apoyándose en la ventaja numérica dentro del terreno de juego, pero, aunque no renunció al ataque, prefirió ser cautelosa.

Emil Martínez fue el hombre que marcaba el ritmo sobre la grama, pero no hizo nada que inquietara el arco del cuadro queretano que, por su parte, intentó poco a pesar de la entrada de Laffatigue, determinada desde un palco por el suspendido técnico Carlos Reinoso.

Amparán declaró: “Siempre ver una luz es ánimo, vida, tener oxígeno, respirar... entonces lo vemos como una posibilidad más de seguir vivos y así se pelea cuando se quiere vivir. Finalmente es el triunfo anhelado de tanto tiempo atrás que se buscaba y se esperaba como catapulta.

Cuando se quiere, se puede. Y cuando se cree, se dan las cosas. Tuvimos un gran partido, mayores posibilidades de gol. Se da uno y es suficiente para el triunfo y estamos en la lucha. Siempre pensé que una victoria y una reacción de Indios presionará (a Tigres y Querétaro) y eso es importante.

Para minimizar la derrota, Reinoso señaló que el asunto del descenso ya no es problema para su equipo y que sólo le preocupa llegar a la liguilla.