Jueves 18 de marzo de 2010, p. 27
Madrid. Francia y España acusaron ayer al grupo armado vasco ETA del asesinato de un policía francés durante un tiroteo ocurrido la víspera en el sur de París, por lo que los presidentes de ambos países, Nicolas Sarkozy y José Luis Rodríguez Zapatero, respectivamente, condenaron este hecho y acordaron redoblar esfuerzos
en el combate a esta organización.
Sarkozy atribuyó a un comando terrorista de ETA
la muerte del policía Jean Serge Nérin, de 52 años, y al expresar su pesar informó que este jueves visitará a la familia del agente. A su vez, el primer ministro Francois Fillon afirmó que el policía fue asesinado a sangre fría por un comando terrorista
.
Según la reconstrucción de los hechos facilitada por el gobierno francés, un comando de ETA integrado por cuatro personas, entre ellos el detenido Joseba Fernández Aspurz, asaltaron una concesionaria de vehículos alemana en la localidad de Dammarie Les-Lyes, a unos cuantos kilómetros de París. El plan era secuestrar al gerente y otro trabajador del centro durante el tiempo en que efectuaban el robo.
Tras hacerse de cuatro vehículos, tuvieron que detenerse más adelante a cargar gasolina. Entonces una patrulla se acercó a revisar los vehículos al detectar movimientos sospechosos, lo que acabó en un enfrentamiento, la muerte del policía y un detenido.
Sarkozy confió en que los otros miembros del comando armado sean detenidos rápidamente, llevados ante la justicia y castigados severamente
, luego del tiroteo en que por primera vez en su historia el grupo armado vasco cobró la vida de un uniformado francés.
Rodríguez Zapatero llamó ayer al mediodía al presidente Sarkozy para darle sus condolencias y expresarle su solidaridad tras el asesinato del policía francés. Ambos gobernantes analizaron la situación y acordaron redoblar esfuerzos para erradicar la lacra del terrorismo de ETA
.
Batasuna, el brazo político de ETA, externó su profunda aflicción
por la muerte del policía francés, en un declaración en Bayona, Francia. Batasuna, autorizada en Francia, está proscrita en España.
El gobierno vasco, por medio el Departamento de Interior, ordenó la prohibición de homenajes a Jon Anza, miembro de ETA cuyo cadáver apareció recientemente en una morgue de Toulouse y al que gente del entorno abertzale considera la última víctima de una supuesta guerra sucia.