Bagdad, 5 de marzo. La red islamita Al Qaeda declaró este viernes un toque de queda en Irak para intentar impedir el desarrollo de las elecciones del domingo y amenazó de muerte a los electores, informó el centro de monitoreo de sitios islamitas SITE.

En cambio, aprovechando el día del rezo musulmán, líderes religioso llamaron a los iraquíes a votar en los comicios del domingo, incluso en las regiones sunitas que habían boicoteado en gran medida las elecciones de 2005.

La participación sunita es esencial para estas elecciones, que se espera marquen el retorno de esa comunidad al escenario político.

El Estado Islámico declara un toque de queda para el día de las elecciones desde las seis de la mañana hasta las seis de la tarde, en todo Irak y especialmente en las regiones sunitas, indicó el grupo en un mensaje difundido en su página de Internet, según SITE.

Por la seguridad de nuestra gente, todos aquellos que sepan de esto infórmenlo a aquellos que no lo saben y aprovisiónense para el toque de queda, agregó.

El Estado Islámico de Irak, la rama de Al Qaeda en el país del golfo Pérsico, agregó que todo el que desafíe el toque de queda “se expondrá a la ira de Alá y a todo tipo de armas de los mujaidines”.

La organización extremista llama además a los sunitas a tomar las armas para purificar la Tierra, que está colmada del politeísmo y de incredulidad de los estadunidenses y sus aliados.

¿Acaso participar en las elecciones produjo alguna vez otro efecto que debilitar a los sunitas y perjudicarlos?, pregunta Al Qaeda, que critica a los líderes chiítas, culpables en su opinión de querer avasallar a los sunitas de Irak.

Unos 19 millones de iraquíes deben votar el domingo en las 18 provincias que sirven también de circunscripciones electorales.

En Bagdad se movilizarán unos 200 mil miembros de las fuerzas de seguridad para vigilar el buen desarrollo de los comicios. El tráfico vehicular estará prohibido en las ciudades.

En su mensaje, Al Qaeda denuncia la ocupación de Irak por los cruzados (las tropas estadunidenses y sus aliados) y estima que participar en las elecciones (...) nunca permitió deshacerse del mal que difunden. Al contrario, su audacia, sus intereses y sus ataques contra nosotros y nuestros símbolos siempre salieron fortalecidos de cualquier escrutinio.

Cuando faltan menos de seis meses para que se retiren de Irak las fuerzas estadunidenses de combate, estos comicios son cruciales para el futuro del país, después de varios años de conflictos.

Las altas autoridades religiosas recalcan la importancia de votar en las elecciones, dijo Ahmed Safi, representante del gran ayatola Ali Sistani de Kerbala, y calificó los comicios de cuestión vital.

Gran Bretaña tomó la decisión correcta al participar con Estados Unidos en la invasión de Irak en marzo del 2003, afirmó el primer ministro Gordon Brown ante la comisión que investiga el conflicto en Londres, y negó las acusaciones de que privó de fondos a las fuerzas armadas.

Fue la decisión correcta y por razones correctas, dijo Brown en una esperada comparecencia de cuatro horas para explicar por primera vez el papel que desempeñó antes y durante esta impopular guerra, cuando era el ministro de Finanzas de Tony Blair.

Añadió que el presidente iraquí Saddam Hussein ignoró durante años los numerosos llamamientos para que respetara sus obligaciones internacionales.