Jerusalén, 23 de febrero. Médicos israelíes salvaron con un método de tratamiento nuevo el pene a un joven musulmán que, tras una circuncición fallida, había quedado reducido a tres centímetros. Los médicos del hospital Carmelo, en Haifa, consiguieron restablecer las funciones del miembro viril y permitir su expansión hasta 11 centímetros, informaron hoy los médicos en Israel. Según las informaciones, el joven, en la actualidad de 21 años, se circuncidó hace dos años por razones religiosas. Tras la intervención el pene resultó herido, cicatrizó y se redujo. La cicatriz impedía también su expansión. Cuando el entonces comprometido no pudo cumplir como hombre casado con sus deberes conyugales, la esposa lo abandonó. Ahora tiene una nueva prometida. En Israel decenas de miles de varones, tanto judíos como musulmanes, son circuncidados. Según la información, el equipo médico, encabezado por el profesor Jaron Har-Shai, empleó una técnica que sólo se aplica en quemaduras en manos y cara, lo que permitió la expansión del tejido cicatrizado. El método es también adecuado para bebés en caso de complicaciones, explicó Har-Shai al diario Jerusalem Post.