La Habana, 20 de febrero. Cuba criticó ásperamente al gobierno del presidente Barack Obama por una reunión realizada entre un alto funcionario de Estados Unidos y opositores locales, pero confirmó que se mantiene abierta al diálogo sobre cualquier tema, siempre que éste sea entre iguales, sin menoscabo a la independencia, soberanía y autodeterminación.

La crítica apareció hoy en una declaración de la cancillería y fue un nuevo ingrediente de tensión en torno a las pláticas migratorias que los dos gobiernos celebraron aquí el día anterior, además del conflicto que surgió por el caso del estadunidense Allan Gross, detenido en La Habana hace dos meses y medio y aún sin cargos penales.

Durante un receso de la undécima Reunión Interparlamentaria Cuba-México, que concluyó hoy, el líder de la Asamblea Nacional cubana, Ricardo Alarcón, dijo que el nuevo episodio muestra que con el actual gobierno poco ha cambiado la actitud norteamericana de seguir tratando de promover la subversión y de intervenir en los asuntos internos de Cuba.

La reunión fue un coctel que ofreció el jefe de la delegación estadunidense a la cita migratoria, Craig Kelly, según informó a La Jornada Vladimiro Roca, uno de los opositores asistentes.

La cancillería dijo que el viernes ratificó a Kelly su propuesta de llegar a acuerdos sobre lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y el tráfico de personas, y para preservar el medio ambiente.

También confirmó la agenda destinada a un diálogo de mayor alcance, para resolver el conflicto histórico de medio siglo, y reclamó la liberación de los cinco agentes cubanos presos en Estados Unidos hace casi 11 años.

El comunicado indicó que al llegar Kelly a La Habana para las conversaciones oficiales, le advirtió que no realizara un evento provocador, ajeno al espíritu de las conversaciones migratorias.

Cuando ambos gobiernos iniciaron aquí en septiembre pasado la negociación para reanudar el servicio de correo directo entre los dos países, la jefa de la delegación estadunidense, Bisa Williams, se reunió con opositores, pero entonces no hubo declaración pública cubana sobre ese caso.

Kelly es subsecretario asistente principal para asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado y el funcionario de más alto rango que ha visitado Cuba bajo el gobierno de Obama. Williams está un escalón abajo.

Es hora ya de que en Washington haya gente capaz de cambiar y actuar como el mundo le exige, que es respetando el derecho internacional y la independencia de los pueblos, dijo Alarcón. Subrayó que su país está por continuar el diálogo sobre migración y otros temas, pero sobre la base del respeto.

La cancillería dijo que la reunión del viernes mostró que las prioridades de Estados Unidos se relacionan más con el apoyo a la contrarrevolución y la promoción de la subversión para derrocar a la revolución que con la creación de un clima conducente a la solución real de los problemas bilaterales.

Roca dijo que nadie le puede impedir a un cubano ir a una sede diplomática y que en el fondo el gobierno no quiere llegar a un arreglo con Estados Unidos.