Venganza, posible móvil de la muerte del sacerdote Parra Puerto
Domingo 21 de febrero de 2010, p. 32
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) solicitó ayer un arraigo de 30 días contra Ulises Amado Amílcar para investigar su presunta responsabilidad en los delitos de falsedad de declaraciones y coparticipación en el homicidio del sacerdote católico José Luis Parra Puerto, miembro de la orden de los Caballeros de Colón, ocurrido el 17 de febrero, informaron autoridades de la dependencia.
Luego de estar casi tres días en calidad de testigo, el Ministerio Público de la Coordinación Territorial Gustavo A. Madero 4 cambió la situación jurídica del joven de 21 años, debido a que cayó en contradicciones de tiempo y forma al relatar los hechos, ya que al principio aseguró que el móvil de la agresión fue el robo del vehículo del párroco, versión que después negó.
Aunque la dependencia determinó que Amado Amílcar no fue quien disparó contra el cura, según los resultados de la prueba de Harrison, las fuentes consultadas señalaron que se presume la probable participación del acompañante de Parra Puerto en la planeación del crimen.
Al descartarse que el móvil del ataque contra el vicario de la parroquia Asunción Sagrario Metropolitano, ubicada a un costado de la Catedral, fuera el robo, la investigación apunta a que se trató de una venganza, aunque la PGJDF no ha revelado el motivo que la originó.
En su declaración, Amado Amílcar, dijo que después de la agresión fue privado de su libertad por los homicidas para después abandonarlo en los límites con el estado de México. El cadáver del religioso fue hallado a bordo de su vehículo en calles del municipio de Nezahualcóyotl.