Sábado 13 de febrero de 2010, p. 19
Sao Paulo, 12 de febrero. Una onda de intenso calor, con temperaturas superiores a 33 grados centígrados, azotó esta semana varios países de Sudamérica, que causó la muerte de 56 ancianos en Brasil y 37 personas en Asunción, Paraguay.
Las ciudades más afectadas del litoral brasileño son Sao Vicente, Santos y Sao Paulo, según reportes de autoridades del sector salud difundidos en el sitio de Internet de la cadena televisiva O Globo, que destacó que la cantidad de decesos es 30 por ciento superior al promedio anual.
En Santos, donde los termómetros alcanzaron 40 grados, la cifra en 2009 fue de 34 muertos. El servicio meteorológico pronosticó más calor para el fin de semana, cuando se iniciará el carnaval de Río de Janeiro y donde la temperatura llegó a 46.3 grados el miércoles, lo que significó un récord en 50 años, con una sensación térmica de 50 grados a causa de la humedad.
Las autoridades estatales emitieron alertas y recomendaciones para minimizar los efectos de las altas temperaturas.
Según la televisora Telesur, se espera que durante el fin de semana la masa de calor se mantenga sobre Paraguay, Brasil y Argentina.
En Argentina, el servicio meteorológico pronostica una máxima de 33 grados para el sábado, antes de que comiencen a llegar masas de aire frío provenientes del sur.
La entidad informó que entre hoy (viernes) y el sábado va a persistir sobre territorio nacional una masa de aire cálido y húmedo que permanece desde enero
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En Nicaragua, las altas temperaturas, que podrían superar 38 grados debido al fenómeno climático El Niño, castigarán el país en los primeros meses del año, informó el Instituto de Estudios Territoriales.
El Niño se sentirá intensamente en territorio nicaragüense por segundo año consecutivo y podría generar prolongadas sequías.
“Todo parece indicar que tendremos la continuación de la incidencia de El Niño”, declaró un meteorólogo de la institución.
Señaló que las altas temperaturas han comenzado a sentirse en Nicaragua, particularmente en zonas del occidente del país, donde en los últimos días se reportaron 36 grados centígrados.
Representantes del Programa Mundial de Alimentos y de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura han advertido que este año la sequía podría provocar hambruna en zonas rurales pobres de Nicaragua y de otros países de Centroamérica.