El año del Geng-yin, el tigre meálico, inicia este domingo y el festejo tradicional –que no el único, pues en otros sitios de la capital, principalmente en restaurantes, habrá festín– para recibir el calendario del año lunar chino tendrá efecto desde el mediodía en la cortedad de la calle de Dolores, en el Centro Histórico del Distro Federal.

Danzas y comida, principal mente, con un poco de pirotecnia y otra dosis de artes marciales, habrá a discreción en la cuadra que va de 16 de septiembre a Artículo 123, que ahora está dedicada a los viandantes y en la que la media decena de restaurantes que ahí se ubican ofrecerán los platillos propios de esta conmemoración.

Sabido es que el zodiaco chino se conforma por 12 animales. Además del felino en cuestión y del año que está por fenecer, que fue el del buey, se consideran también los de la rata, que ocupa el primer lugar, y siguen, en ese orden, el del conejo, dragón, serpiente, caballo, borrego, chango, gallo, perro y cerdo.

El año comienza con la segunda luna nueva después del solsticio de invierno, que ocurre el 21 de diciembre, por lo que la primera fue el 15 de enero.

El del tigre, que numéricamente es el 4708, trae también supersticiones para el primer día, como la de abrir puertas y ventanas para recibir la fortuna por los próximos 12 meses; los fideos de los guisados no deberán cortarse, se deben ingerir completos para no cortar la vida; no se debe barrer, pues si se hace, se va la buena fortuna, y para quien busque prosperidad deberá comerse un pollo entero, incluidas la cabeza y las patas.

De capital importancia es que todas las deudas deben estar saldadas para comenzar bien el año. Hay que abstenerse de comer carne roja en ese primer día para asegurar vidas largas y felices; y quepa aquí la salvedad de que el segundo día de la primera quincena, que es la longitud de las festividades allá en la nación asiática, es el cumpleaños de todos los perros. En hechos no tan esotéricos, el día del año nuevo se calcula que se intercambiarán vía correo electrónico, unos 9 mil millones de mensajes entre chinos y amigos.

Quienes nacen en los años del tigre –el anterior ocurrió en 1998 y le antecedieron 1986, 1974, 1962 y sigan los lectores restando 12 a cada año para encontrar el suyo– son propensos a pensamientos profundos, capaces de dar afecto, aunque de temperamento irritable, explosivos y con inclinaciones a entrar en conflicto con la autoridad.

En ocasiones se exasperan por las decisiones súbitas que toman, por el descuido que en ellas va. Son valientes, pero sospechan de los demás. Son compatibles con caballos, dragones y perros

Los agoreros orientales advierten a las parejas que piensen unirse en este año que no lo hagan, aconsejan postergar el casorio hasta el siguiente, o sea, el del conejo, para asegurar una vida plena.

El calendario chino está basado en los movimientos lunares y solares. El ciclo lunar se cumple cada 29 días y medio, por lo que cada siete años, en un ciclo de 19, se inserta un mes adicional para empatarse con el calendario solar, de ahí que el día del comienzo no sea fijo

En torno a la celebración en la capital mexicana, las danzas del colorido dragón, que es llevado por jóvenes de ascendencia china, al igual que los leones de la bondad, habrán de efectuarse a partir del mediodía y la recomendación para los visitantes es que si quieren apartar mesa en cualesquiera de los comederos lo hagan con la debida anticipación.