Cuando rebasa la disciplina castrense se han producido episodios trágicos, advierten
El general Galván no se refirió a esa iniciativa, sino a otras que están congeladas, dice el PAN
Jueves 11 de febrero de 2010, p. 7
Cuando el Ejército ha rebasado la barrera de la disciplina castrense para involucrarse en política han tenido lugar algunos de los episodios más trágicos de la vida nacional, advirtieron legisladores y funcionarios de PRI, PRD y PT, al condenar el apoyo público del titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guillermo Galván Galván, a la iniciativa de reforma política del presidente Felipe Calderón.
En lo que debe estar pensando en este momento el Ejército Mexicano es en el tema de la inseguridad; especialmente ahora, cuando la situación es de tal gravedad que puede trascender el tema de la seguridad pública para convertirse en un asunto de seguridad nacional, dados los crecientes niveles de violencia en el país
, afirmó Samuel Aguilar Solís, secretario adjunto de la dirigencia nacional del PRI.
El presidente de la Comisión Bicamaral de Seguridad Nacional, el panista Felipe González, sostuvo que el secretario de la Defensa Nacional actuó dentro del marco legal al convocar a acuerdos políticos y pedir que se aprueben las reformas pendientes. Si en la lucha contra el crimen organizado los militares ponen los muertos, tienen derecho a opinar
, dijo.
Al participar como único orador en la ceremonia por el 97 aniversario de la Marcha de la Lealtad, el pasado martes, el general Galván destacó que sólo mediante reformas integrales estaremos en condiciones de consolidar ese bienestar colectivo que todos exigen, pero que no todos procuran
.
Estas declaraciones, aseguraron priístas, perredistas y petistas, no se corresponden con la posición institucional y de respeto a la división de poderes que hasta ese momento había distinguido a las fuerzas armadas.
“La Constitución ordena la separación clara entre el Ejército y la política. Cuando se rompe esa frontera se presentan excesos, como los ocurridos durante la guerra sucia en los años 70; entonces el Ejército se convirtió en instrumento de combate contra la disidencia política”, recordó el coordinador de los diputados del PRD, Alejandro Encinas.
El dirigente nacional del PT, Alberto Anaya, sostuvo que la utilización del general Guillermo Galván Galván por Felipe Calderón para promover su iniciativa de reforma política muestra la desesperación del Presidente, quien no cuenta con el apoyo de los partidos políticos ni de la sociedad, además de que pone en evidencia la debilidad del Ejecutivo federal.
A su vez, el vicecoordinador de la fracción panista en San Lázaro, Roberto Gil, manifestó: Nosotros reconocemos el trabajo de las fuerzas armadas en una contingencia difícil, como es la inseguridad pública que vive el país. En ese sentido, nosotros creemos que la sociedad entera debe estar del lado de los cuerpos y las fuerzas de seguridad del Estado mexicano en todos sus niveles y dimensiones. Es necesaria la unidad de la sociedad en torno a nuestros cuerpos y fuerzas de seguridad, porque son quienes están construyendo la tranquilidad del país
.
Su compañero de partido, el senador Felipe González, sostuvo que el secretario de la Defensa no se refirió a la reforma política, sino a otras iniciativas que están congeladas en el Senado, entre ellas la modificación constitucional para legalizar la participación de las fuerzas armadas en el combate al narcotráfico, que de aprobarse le permitiría declarar estados de excepción.
El petista Ricardo Monreal respondió que ni en la Constitución ni en la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal se otorgan facultades al secretario de la Defensa Nacional para llamar a las fuerzas políticas a suscribir acuerdos, como los que invocó el pasado martes.