La Organización de las Naciones Unidas (ONU) entregó a los gobiernos estatales mexicanos el programa contra la trata de personas, con el fin de que ratifiquen los instrumentos internacionales en sus legislaciones locales, como vía para combatir ese delito.

Durante una reunión en la Secretaría de Gobernación, funcionarios estatales se comprometieron a sumarse a la campaña internacional Corazón Azul.

El marco jurídico nacional en materia de trata es relativamente reciente (noviembre de 2007), y, a pesar de importantes avances, sigue siendo inacabado, ya que muchos estados de la Federación aún no cuentan con legislación específica en esta materia, señaló el gobierno nacional en un documento entregado a los secretarios de Gobierno estatales que acudieron a Bucareli.

Raúl Cuevas Sánchez, secretario de Gobierno de Tlaxcala, estado donde la próxima semana será instalado el consejo local contra la trata de personas, dijo que este delito representa un problema mundial y añejo. Agregó que existe un interés muy claro de los gobiernos de mundo por combatirlo. Recibimos una invitación para que los estados nos sumemos a estas tareas, señaló al término de la reunión encabezada por José Antonio Guevara, de la Comisión Intersecretarial para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas.

La ONU, por conducto de su oficina contra la droga y el delito, promueve la ratificación de los acuerdos internacionales y monitorea el cumplimiento de éstos, además de brindar asistencia técnica a los Estados.

Corazón Azul es un movimiento global que busca crear conciencia sobre ese delito y su impacto en la sociedad. A escala nacional se prepara un amplio programa para la difusión de las causas y consecuencias de ese ilícito.