Campeche, Camp., 4 de febrero. Decenas de taxistas dañaron las oficinas de la Subprocuraduría General de Justicia del estado, volcaron cuatro patrullas, incendiaron un vehículo particular y se enfrentaron a golpes con policías en protesta porque uno de sus compañeros, José Luis Flores Rosado, de 33 años de edad, murió en los separos de la dependencia cuando lo interrogaban, acusado de encabezar una banda de asaltantes.

El enfrentamiento ocurrió entre las dos de la madrugada y las ocho de la mañana de este jueves, cuando iba a ser entregado el cadáver de Flores Rosado –quien fue citado a comparecer horas antes–, con un reporte médico según el cual falleció por un paro cardiaco.

Flores Rosado y sus compañeros Salvador Hernández Balan, William Jesús Sánchez Pérez y un chofer sólo identificado como Mario fueron citados a declarar el miércoles, acusados de ser ladrones. Los tres últimos fueron liberados, pero los agentes ministeriales Jesús Ortiz Tun y Ángel Roberto Altamirano Aguilar, junto con otros dos policías, interrogaron a Flores Rosado, quien falleció alrededor de las ocho de la noche del miércoles, al parecer por tortura.

La muerte del taxista trascendió fuera de la subprocuraduría, que fue rodeada por más de 200 integrantes del Sindicato Único de Trabajadores del Volante (SUTV). El número de inconformes aumentó en la noche. Patrullas de la Policía Estatal Preventiva, apoyadas por elementos de la Marina, reforzaron la vigilancia.

Familiares del chofer dijeron que intentaron convencerlos de que la muerte se debió a un paro cardiaco y los taxistas arremetieron contra las oficinas, rompieron los cristales de la puerta principal e irrumpieron en las oficinas del subprocurador Éric Cicler Zavala para reclamar el cadáver, a fin de practicarle una necropsia.

Alrededor de las dos de la madrugada los inconformes incendiaron una camioneta pick-up propiedad de Guadalupe Mendoza Inurreta, secretario de Vigilancia del SUTV, a quien acusaron de señalar a integrantes del gremio ante la Subprocuraduría.

La violencia se generalizó a las cuatro de la madrugada, cuando los taxistas volcaron cuatro camionetas de la Policía Ministerial e intentaron linchar a Guadalupe Mendoza, quien huyó protegido por policías.

Al mediodía del jueves, el procurador estatal Renato Sales Heredia propuso a parientes y compañeros del taxista que un médico designado por la familia, otro de la Comisión de Derechos Humanos y uno de la procuraduría estatal investiguen la causa real del deceso.