La película, que se estrena hoy, toma personajes de la Guerra Cristera, como Agustín Pro
Es una cinta que nadie se había atrevido a filmar
, afirma Ariane Pellicer
Actúan también Sandra Echeverría, Raúl Méndez y Marco Treviño, entre otros
Será una triología, dice el director
Viernes 5 de febrero de 2010, p. a10
Con las actuaciones de Raúl Méndez, Claudio Lafarga, Sandra Echeverría, Marco Treviño y Ariane Pellicer, todos bajo la dirección de Francisco Chisco Laresgoiti, se estrena hoy con 110 copias la película de ficción 2033, cuyo origen, según su creador, fue “muy sencillo, porque estaba muy intrigado con una guerra que no se ha contado en México, que es la Cristera; me interesó mucho rescatar personajes de ésta, como al padre Miguel Agustín Pro y a los generales Enrique Goroztieta y Joaquín Amaro.
Quise ubicarlos en el futuro, en una sociedad donde no hubiera religión, y contar una historia en la que las nuevas generaciones carecieran de valores.
En 2033, la ciudad de México se llama ahora Villaparaíso, cuyo gobierno militar controla la sociedad, a la cual le han quitado su fe religiosa y su libertad de expresión.
La mayoría de la población vive controlada mediante una bebida adictiva llamada Pactia, y la clase dominante vive con lujos y festivamente. Pablo, el protagonista, es el hijo adoptivo del general que dirige al país; es un joven consentido que se cobija en las drogas y el alcohol.
Ayuda a los desprotegidos
Pablo conoce a Lozada, sacerdote oculto
, conocido como padre Miguel, quien transforma su vida: abandona sus privilegios para ayudar a los desprotegidos y lucha junto con los Creyentes para derrocar al régimen. En el camino se enamora de Lucía, quien le da mayor sentido a su vida.
También en entrevista con La Jornada, la actriz Ariane Pellicer reitera: “2033 es una historia-ficción inconclusa sobre la Guerra Cristera, la cual nadie se había atrevido a filmar, de hecho, es ese conflicto trasladado al futuro.
El guión es interesante porque el ejército junto con la iniciativa privada toma el poder, se ponen de acuerdo para manipular al pueblo. Es algo que no está tan lejano, es una llamada de atención de que si no nos ponemos las pilas ahora, nos puede pasar. Por otro lado, es una crítica muy ácida a la sociedad consumista, cuestiona la importancia del poder y no olvida la parte humanista.
De vuelta, Larresgoiti precisa sobre 2033: Es una película de lo que puede ser posible; habla de una ciudad gobernada por una milicia dictatorial, en la cual la globalización llevó a los empresarios a regular el futuro de los habitantes. Además, soy férreo fanático de las teorías de las conspiraciones. Siempre he creído que la humanidad ha estado manipulada en muchos sucesos de la historia, y en eso nos inspiramos. Quisimos meterle muchas cosas de cómo las economías controlan la política y abrir los ojos a la gente.
Sentimientos oscuros
La ex Nina la Punk, menciona: “Mi personaje es una mamá con sentimientos oscuros que está detrás del poder y domina la situación; su relación con su hijo empeora porque él, siendo un burgués, sale al mundo real a conocer drogas, sexo y poder.
Trabajé con un equipo maravilloso, hice clic inmediato con el director.
Respecto del tema militar que hay en la cinta, el director menciona: “Es muy importante porque 2033 es la segunda parte de una trilogía. Decidimos contar la historia en el acto número dos porque era el más impactante; quisimos mostrar un México cambiado, controlado por un régimen fuerte. La idea, entonces, fue hacer una segunda parte como precuela, con el contexto de las elecciones de 2012, suponiendo que nadie gane y entre un gobierno militar que se une a los empresarios, o una falsa derecha, para tomar el poder; esta segunda parte la tengo planeada estrenar entre abril y mayo de 2012, porque ya tenemos un primer borrador, donde los protagonistas se unen en un falso documental con contendientes reales de la política”.
Héroes ideales
Para cerrar su idea, Chisco Laresgoiti menciona: La tercera parte sería más esperanzadora: reivindicaría a los mexicanos, luego de tanto fatalismo y situación extrema. Sería una tercera parte que relajaría todo, en la cual México saldrá adelante con héroes e ideales
.
Para volver a 2033, Chisco agrega: Desde la concepción de la idea hasta el estreno pasaron cinco años; la filmamos en 33 días y la posproducción tardó año y medio, por los efectos especiales. Nos retrasamos porque queríamos que quedara bien; no podía dejar que una película de este tipo quedara chafa, sino con buena calidad de producción, para que esta visión del futuro fuera verosímil
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El director recomienda: Queremos estar un buen rato aquí en el Distrito Federal; sé que tengo un buen producto, para que la gente vea buena ciencia ficción hecha en México. Me encantaría que el público llenara las salas; sabemos que el cine nacional tiene que mantener una buena recaudación, si no la sacan de cartelera, así que invito a todo el público a que asista a verla
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Para mayores informes visitar www.2033.com