Exigen a Calderón hacer extrañamiento al gobierno de Obama
Jueves 4 de febrero de 2010, p. 9
El Senado rechazó las nuevas disposiciones presupuestarias del gobierno de Estados Unidos para reforzar la seguridad en la frontera en 2011, que incluyen 4 mil 600 millones de dólares para apoyar la labor de 20 mil agentes de la Patrulla Fronteriza y continuar el muro virtual
con México, y demandó al presidente Felipe Calderón que haga un extrañamiento
a la administración de Barack Obama por su política antimigrante.
Ante el pleno, todas las fuerzas políticas rechazaron el viraje del mandatario estadunidense. La priísta Rosario Green aseveró que “Obama ha decidido desdecirse de la promesa que en su momento había hecho a los grupos hispanos que lo apoyaron en todo momento, y ahora insiste en cerrar la frontera”.
La ex canciller destacó: preocupa porque los mexicanos no sabremos a qué atenernos con el presidente de todos los estadunidenses, porque falla en el cumplimiento de su palabra; no sólo falla en 2009: falla en 2010 y fallará también en 2011
.
El punto de acuerdo fue presentado por las senadoras Adriana González (panista) y Claudia Corichi (perredista), quienes señalan que la petición presupuestal para 2011 que Obama solicitó al Congreso ha puesto el acento en el reforzamiento de la seguridad fronteriza
, y con esa determinación deja de lado los cinco aspectos positivos de la plataforma electoral que durante su campaña ofreció en materia migratoria:
Crear un sistema de apoyo para los indocumentados que cumplan con los requisitos para legalizar su estatus migratorio; atacar y desmantelar las organizaciones de contrabando y combatir la delincuencia asociada al narcotráfico; ayudar con políticas que generen desarrollo y crecimiento económico para los países expulsores; terminar con las redadas, y reformar la burocracia disfuncional que evita la reunificación familiar.
Esas medidas lastiman la relación bilateral en conjunto, son contrarias al espíritu de cooperación que debe prevalecer para garantizar la seguridad en la frontera común, propician un clima de tensión en las comunidades fronterizas y generan divergencias en lugar de convergencias
.
De llevarse a cabo tal y como se anuncian esas medidas poco reflexivas y sumamente precipitadas, seguirán cosechando el repudio de la comunidad internacional y producirán todo tipo de efectos negativos en materia comercial, laboral y ambiental
, advirtieron.