Perredistas de distintas corrientes y ciudadanos independientes conformarán este lunes la Red Nacional por la Unidad de las Izquierdas, mediante la cual buscan transformar al Partido de la Revolución Democrática (PRD), recuperar los nexos de la institución con la sociedad e impulsar cambios nacionales que culminen con la conformación de un referente electoral amplio y diverso en las elecciones de 2012.

Desde hace varios meses trabajan en pos de este proyecto Alejandro Encinas, Alejandra Barrales, Pablo Gómez, Alfonso Ramírez Cuéllar, jefes delegacionales capitalinos (de Xochimilco, Gustavo A. Madero, Tláhuac y Coyoacán), diputados federales y locales, entre otros, en un espectro que abarca a militantes de 22 estados.

Encinas, coordinador de los diputados federales del PRD, rechazó que se trate de una asociación de damnificados de las corrientes políticas o del aparato partidario, aunque, admitió, hay una especie de orfandad en un sector muy vasto de la militancia partidaria, en torno a tareas concretas que le permitan su desarrollo político y personal dentro del partido.

También negó que se trate de la constitución de una nueva corriente perredista que busque la confrontación con las actuales expresiones.

Nos estamos sumando diferentes equipos, trayectorias, liderazgos. Algunos a título personal, otros más como equipos políticos, muchos provenientes de otras expresiones que no queremos repetir prácticas (de las actuales corrientes) ni tolerar ciertas formas de hacer política. El interés es no claudicar en este proyecto y reafirmarnos para 2012, señaló por su parte Alejandra Barrales, presidenta de la comisión de gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

Los resultados negativos de las pasadas elecciones confirmaron que hubo un cobro de factura de los votantes hacia nosotros, que tiene mucho que ver con nuestras prácticas internas, y por eso resulta importante reorganizarnos de una manera directa. El 5 de julio, insistió la legisladora, se confirmó el desgaste de liderazgos en el PRD y de algunas prácticas que se venían dando.

Barrales y Encinas informaron que habrá acercamientos con movimientos sociales, obreros –mencionaron al Sindicato Mexicano de Electricistas– y campesinos no necesariamente vinculados con el PRD.

La discusión, especificó el segundo, la trasladará la red a las 32 entidades del país, en una gira que les llevará hasta julio de este año en la que, a la par, apoyarán toda la actividad electoral del partido en los 15 estados donde este año habrá comicios. Vamos a trabajar por el fortalecimiento del PRD, su vida institucional, por la unidad interna, pero también porque tengamos un acercamiento más vasto con otros sectores partidarios.

En su declaración política, la Red por la Unidad Nacional de las Izquierdas indica que el PRD no ha estado a la altura de las circunstancias, pues a pesar del creciente desgaste de la clase gobernante desde los fraudes electorales de 1988 y 2006, ante la crisis económica y la violencia criminal, ha sido incapaz de canalizar el descontento social y es evidente la falta de una línea de conducción sólida por la dirigencia nacional.

Asume la vía electoral como un medio para la toma de poder. Nuestro programa es por la transformación social, económica y política de nuestra nación. Quienes suscribimos estos planteamientos nos haremos cargo y seremos actores del cambio con el pueblo mexicano, acompañados del impulso de los movimientos sociales y la lucha parlamentaria, contrario a aquellos grupos oligárquicos que han optado por la entrega de los recursos nacionales y contra el Estado laico, libre y democrático.