Vampiritos ofrece bebidas, cigarros, botanas, hielos y hasta condones en menos de 30 minutos
Advierten sobre falta de regulación a la franquicia, que hasta es promovida por autoridades
Lunes 1º de febrero de 2010, p. 33
Los operativos en centros nocturnos, el alcoholímetro y la inseguridad dejaron de ser obstáculos para continuar el reventón los fines de semana. Con el simple hecho de marcar un número telefónico los interesados reciben en su domicilio bebidas, botanas, cigarros, hielos y hasta condones en menos de 30 minutos, con precios menores a los ofrecidos en bares, cantinas o restaurantes, y la posibilidad de comprar algunos de sus denominados party pack.
La demanda de su servicio ha permitido su crecimiento en los cuatro puntos cardinales de la capital, representando una fuerte competencia para diversos centros de entretenimiento ubicados en zonas turísticas y comerciales, sobre todo en los días recientes, ante la verificación de más de 350 negocios en las delegaciones Cuauhtémoc, Benito Juárez, Coyoacán, Álvaro Obregón, Gustavo A. Madero, Miguel Hidalgo y Cuajimalpa.
La emergencia sanitaria por la influenza A/H1N1 permitió la expansión de este servicio de bar a domicilio, denominado Vampiritos, al determinarse el cierre de restaurantes y bares por algunos días, señala en su página de Internet, a lo que se suma ahora la revisión de negocios para garantizar el cumplimiento de la Ley de Establecimientos Mercantiles, que los obliga a dejar de vender bebidas alcohólicas a las 2:30 horas y cerrar sus puertas media hora después.
El servicio ofrecido desde hace tres años por esta empresa es de jueves a sábado, de las 19 a las 4 horas, en colonias como Polanco, Interlomas, Tecamachalco, Bosques, Las Lomas, Condesa, Del Valle, San Miguel Chapultepec, Roma, Escandón, Anzures, Santa Fe y Taxqueña, y algunos puntos del estado de México, con la posibilidad de adquirir esta franquicia más una inversión de 400 mil pesos, que incluye mobiliario, uniformes, capacitación y cámaras de seguridad, hasta una cuenta para pagar los gastos operativos de tres meses.
Padres de familia consultados sobre este servicio expresaron temor. “Con sólo una llamada te traen las botellas solicitadas, pero quién garantiza que no se entreguen a menores de edad o puedan ofrecerles hasta drogas. No existe ninguna regulación sobre este mercado, pues los operativos van a los establecimientos físicos, no a los virtuales. Y hasta las propias autoridades federales promueven su crecimiento, al ofrecerlo en sus ferias de franquicias”, comentaron.