El resultado de las recientes elecciones presidenciales en Chile influirá en el proceso de derechización en América Latina (AL); sin embargo, debido a la existencia de grandes contrapesos –Brasil, Venezuela, Ecuador y Argentina– no podría esperarse un efecto dominó conservador en la región, sobre todo porque el modelo neoliberal está en crisis.

Expresaron lo anterior Darío Salinas Figueredo, profesor investigador de posgrado en ciencias sociales de la Universidad Iberoamericana, y Juan Carlos Gómez Leyton, de la Universidad Arcis de Santiago, quienes explicaron que entre las causas del arribo al poder de la derecha están el hecho que las corrientes conservadoras ostentan el poder económico y que algunas izquierdas no son capaces de representar una auténtica alternativa antineoliberal.

Que la derecha haya conseguido llegar a La Moneda –sede de la presidencia chilena– no es una sorpresa, dijo Gómez Leyton, pues en dos procesos electorales previos estuvo a punto de hacerlo y, además, desde el pinochetismo nunca perdió el poder. Apuntó que las causas directas de la derrota de la Concertación radican en su división, en que durante los cuatro gobiernos que encabezó se dedicó a construir una sociedad neoliberal, así como la ausencia de una izquierda antineoliberal.

Durante un foro organizado por la Asociación Salvador Allende Gossens, Gómez Leyton destacó que el problema radica en que en izquierdas como la chilena no hay proyecto. En Chile la derecha trabajó tranquilamente durante 20 años para obtener el gobierno, porque el poder ya lo tenía, expresó.

Por su parte, Salinas dijo que está abierta la posibilidad de que en América Latina haya más gobiernos conservadores, y añadió que esta tendencia está representada también en México, Colombia, Panamá y Perú.

Afirmó que el triunfo de la derecha en Chile ofrece una mirada involutiva dentro de los procesos integracionistas y críticos del neoliberalismo, aunque subrayó que dada la crisis de ese modelo se avizora un proceso de construcción de alternativas.