Chilpancingo, Gro., 30 de enero. El periodista Jorge Ochoa Martínez fue ejecutado de un balazo aproximadamente a las 22:30 horas del viernes en la cabecera municipal de Ayutla de los Libres, en la Costa Chica, ubicada a unos cien kilómetros de Acapulco, informó hoy Valentín Díaz Reyes, director de la Policía Ministerial del estado.

Ochoa Martínez era director y editor de los semanarios El Oportuno y El Despertar de la Costa, que circulan en la Costa Chica.

Según el reporte que recibimos, a esa hora cuando se encontraba en su vehículo, cerca del restaurante El Charco de las Ranas, fue asesinado de un balazo el periodista Jorge Ochoa, dijo el jefe policiaco.

Mencionó que como sucede en estos casos, ninguna persona que presenció el crimen quiso dar su versión de los hechos. Pero ya se inició la averiguación previa para ubicar a los responsables.

Dijo que no se puede vincular el asesinato con el crimen organizado, debido a que no cuenta con los elementos; lo que hacemos es investigar el caso: sólo se sabe que fue ayer en la noche en Ayutla.

Seguridad Pública y Protección Civil señalaron a su vez que en la cabecera municipal de Ayutla de los Libres, entre las calles Mina y Plan de Ayutla, fue ejecutado el periodista cuando salía del restaurante El Charco de las Ranas, pero no dio más detalles.

Jorge Ochoa Martínez, que era director y editor de los semanarios El Oportuno y El Despertar de la Costa, en imagen del 6 de eneroFoto Óscar Alvarado

Ochoa Martínez fue director de comunicación social del gobierno municipal de Ayutla de los Libres que encabeza el priísta Armando García. El periodista vivía en la colonia Amate, de Chilpancingo, donde será sepultado este domingo.

Se inició en el oficio como reportero en la fuente policiaca para los diarios Expresión Popular y El Sol de Chilpancingo.

Con este crimen, la lista de comunicadores asesinados durante el gobierno panista en México se elevó a 60. En ese periodo ocho comunicadores desaparecieron y ocurrieron siete atentados con explosivos a instalaciones de medios de comunicación, de acuerdo con un recuento realizado hace dos semanas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Sólo en Guerrero han sido ultimados cinco periodistas desde 2003 y uno está desaparecido. El primero fue Rafael Villafuerte Aguilar, director del periódico La Razón: Misael Tamayo, director de El Despertar de la Costa (Grande), ejecutado en Zihuatanejo en 2006; Amado Ramírez Dillanes, corresponsal de Televisa en Acapulco en 2007, y Jean Paul Ibarra Ramírez, fotógrafo del diario El Correo, el año pasado.

Además, Leodegario Aguilera Lucas, director de la revista Mundo Político, se encuentra desaparecido desde 2004. Todos estos casos permanecen sin resolver.