El chef catalán Ferrán Adrià anunció que cerrará El Bulli dos años para reorganizarlo
La creatividad gastronómica, muy estresante cuando se compagina con servir comidas diario
Jueves 28 de enero de 2010, p. 9
Madrid, 27 de enero. El Bulli, considerado el mejor restaurante del mundo, cerrará sus puertas el 2012 y 2013, periodo que su chef, Ferrán Adrià, dedicará a la creatividad de sus platos.
El prestigioso cocinero hizo el anuncio en la feria de gastronomía Madrid Fusión, que concluirá este jueves en la capital de España.
Para nosotros el formato actual de El Bulli se ha acabado
, dijo Adrià en una rueda de prensa.
No se cierra el espíritu de El Bulli, no son dos años sabáticos, sino un tiempo con mi equipo para reorganizar todo, como quedará para 2014.
El restaurante El Bulli, situado en una cala de la localidad gerundense de Rosas, abre seis meses al año sólo para cenas, con un menú cerrado que se cambia cada temporada.
Igual que decidimos cerrar seis meses, cerraremos dos años
, manifestó Adrià, quien mantendrá en actividad sus dos centros creativos: el Bullitaller, en Barcelona, y el del propio restaurante en Cala Montjoi.
Durante esos dos años Adrià y su equipo se plantearán cómo va a ser El Bulli hasta el 2020, plazo que considera razonable, puesto que entonces tendrá 57 años.
Adrià no quiso desvelar cómo será el nuevo formato del restaurante, sólo anticipó que dará de comer
, que cada temporada será diferente en cuanto a fechas de apertura y número de clientes y que seguirá creando. Manifestó que tiene 500 ideas, pero desconoce cuál de ellas prosperará.
El chef reconoció que en un primer momento pensó en el cierre definitivo del restaurante, pero alguien, cuyo nombre no quiso revelar, le hizo ver que tenía un compromiso con muchas personas, con una generación de creadores españoles que han puesto la cocina de España en la vanguardia mundial.
Era dejar en la estacada un proyecto de mucha gente, somos uno más, y no podíamos
, reconoció y definió luego la cocina española como un adolescente muy bien formado al que le quedan unos 10 años de maduración.
Adrià, acompañado en una multitudinaria rueda de prensa por su socio Juli Soler y ante la atenta mirada de su compañero de profesión Juan María Arzak –quien bromeó con montar un bar en El Bulli–, dijo que la creatividad gastronómica es muy estresante cuando se compagina con servir comidas diariamente.
No puede ser que durante 25 años todo sea cocina, cocina, cocina, restaurante, restaurante, restaurante. Dedicaremos mucho tiempo a esto, pero también a la familia
, afirmó el chef, cuyo establecimiento tiene tres estrellas Michelin.
Desde 1987 cambiamos anualmente, intentando hacer vanguardia
y trabajando 330 días al año.
Abrir cada día, trabajar 15 horas y hacer creatividad es de locos
, declaró Adrià, refiriéndose a sus compañeros de profesión.
El Bulli logró en abril de 2009, por cuarto año consecutivo, el título de mejor restaurante del mundo que otorga la revista Restaurant a partir de un sondeo entre más de 800 cocineros, críticos y expertos de la industria.
Este año en Madrid Fusión, Adrià recordó lo que había hecho en su restaurante en la temporada 2009, como ravioles de parmesano al aroma de trufa blanca (en la que el comensal tiene que oler la trufa recién cortada en una copa de cristal), canapé de tordo con ostras o consomé de paloma con hojaldre de otoño.