Los acusa de privilegiar las maquinarias partidistas por encima de los ciudadanos
Pide dejar atrás membretes
, la congeladora legislativa o permanente estafa en la falta de decisiones
en las cámaras
Convoca a diputados de Acción Nacional a defender su decálogo
Miércoles 27 de enero de 2010, p. 3
Puebla, Pue., 26 de enero. El presidente Felipe Calderón Hinojosa arremetió contra los críticos de su reforma política, a quienes acusó de privilegiar las maquinarias partidistas por encima de los ciudadanos y de seguir optando por un sistema político cerrado y bajo su control.
Reunido con los 143 integrantes de la bancada panista en San Lázaro, los llamó a defender en todos los foros posibles, incluidas las redes sociales de Internet, la iniciativa de reforma que envió al Congreso en diciembre pasado para dejar atrás los membretes
partidistas, la congeladora legislativa
o lo que definió como permanente estafa en la falta de decisiones
en las cámaras.
Un día después de que líderes del PRI y del PRD, así como juristas y especialistas, cuestionaron el decálogo político propuesto por Calderón, e incluso algunos lo catalogaron como un intento de reforzar el autoritarismo, el Presidente mostró su abierta inconformidad con estas posturas. De hecho, la Presidencia de la República convocó de última hora a la prensa para que cubriera un acto que usualmente mantiene en agenda privada por ser de carácter partidista.
En la reunión para definir la agenda del grupo parlamentario del blanquiazul, el michoacano comenzó por repasar las cosas positivas
de su administración, así como –dijo– se vale puntualizar las malas. Enseguida afirmó que su iniciativa de cambios políticos es benéfica para los ciudadanos y aseveró que a nadie le extrañe que Acción Nacional esté del lado de ellos, porque no nació desde el poder sino desde la ciudadanía.
Flanqueado por César Nava y Josefina Vázquez Mota, presidente del Partido Acción Nacional y coordinadora de los diputados, respectivamente, recordó que los fundadores de su partido tuvieron muy claro que para transformar a México había que llevarlo del autoritarismo a la democracia, de la cerrazón a la pluralidad y de la opacidad a la transparencia.
Sin mencionar el nombre de la dirigente del PRI, Beatriz Paredes Rangel, quien el pasado martes advirtió que las candidaturas independientes no pasarán
, Calderón Hinojosa señaló que sólo pueden rechazarlas quienes no tienen confianza en los ciudadanos o la tengan más en los aparatos partidistas que en los ciudadanos mismos.
Defendió la relección de legisladores y alcaldes, porque así los servidores públicos rendirán cuentas en muchos lugares donde no lo hacen, y aseguró que la segunda vuelta para la elección del presidente de la República permitirá una doble oportunidad para el ciudadano y que pueda aceptar o rechazar las opciones que son presentadas.
Una de las dos ocasiones en que fue interrumpido por los aplausos de sus correligionarios fue cuando señaló que la iniciativa preferente permitirá terminar con la congeladora legislativa, que es una expresión de irresponsabilidad
de los políticos con los ciudadanos.
Aclaró que no propone un poder superior al del Congreso en el cual valga más la autoridad o la propuesta del Ejecutivo, sino un mecanismo eficaz que obligue a los legisladores a asumir su responsabilidad de decir sí o no a una respuesta concreta.
En ese momento el mandatario subió más el tono de voz y se mostró vacilante, como cuando invitó a los diputados de su partido a abandonar
este esfuerzo, término que sustituyó después por el de abanderar
, o cuando señaló que la iniciativa preferente obliga a los diputados a definirse no en un sentido, en sin sentido o en otro
.
También deploró que mientras los temas más críticos del país se guarden y se archiven por meses y por años, el ciudadano seguirá sufriendo una permanente estafa en la falta de decisiones de quien lo representa
.
Después de reiterar que su iniciativa es absolutamente perfectible y puede ser mejorada, dijo estar consciente de que habrá quienes se opondrán por muchas razones y mucha gente. Pero, seguramente, quienes privilegian las maquinarias partidistas, por encima de los ciudadanos, seguirán optando por un sistema político cerrado y bajo control
.
Rechazada por la oposición la propuesta de incrementar de 2 a 4 por ciento el voto mínimo para que un partido político conserve el registro, Calderón aseguró que su iniciativa garantiza una verdadera representatividad ciudadana y no un membrete carente de sustento
.
El mandatario fue insistente en instruir a sus correligionarios a no hacer oídos sordos
y a asumirse como los portavoces de su reforma, que expliquen al ciudadano las ventajas, pero también escuchen críticas y propuestas. Esto no puede ser una reforma elaborada, discutida y aprobada, o rechazada únicamente por los políticos y los gobernantes
, sentenció.
Así demandó a los diputados panistas poner toda su capacidad política, imaginación, audacia y fuerza en este proyecto, ya que son muchos los obstáculos, los mitos, los prejuicios y los intereses que hay que enfrentar y vencer para que estas modificaciones lleguen a buen puerto.