Cuernavaca, Mor., 26 de enero. El presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Morelos, Fausto Aragón Gutiérrez, exigió a las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de Marina (Semar) no ordenar a sus elementos que disparen a las personas que les parezcan delincuentes, porque así acribillan a inocentes en la guerra contra el crimen organizado, que ya dejó tres civiles muertos durante 2009 en la entidad.

Acribillar personas es una actuación impropia e inadecuada de los elementos que reciben órdenes, y seguramente sus superiores jerárquicos les indican que cuando den señal de parar a un automóvil y no lo haga, de presumir que ahí va un delincuente, lo acribillen. Pero eso está mal, es un error, y lo deben corregir porque todos sabemos que se puede inmovilizar un vehículo sin matar al que lo maneja, dijo.

“No pueden acabar con la vida de una persona sólo por suponer que es delincuente, porque se negó a parar en un retén o se atravesó en un operativo”, insistió.

Aragón Gutiérrez observó que entre las 33 quejas que ha remitido a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), destacan tres por muertes de civiles a manos de elementos de la Sedena y la Semar. El primero es Oswaldo Sánchez Cabrera, campesino que se negó a parar en un retén en el poblado de Alpuyeca, municipio de Xochitepec, y fue abatido el 20 de septiembre pasado.

Las otras dos ocurrieron en los operativos de la Marina en el fraccionamiento Los Limoneros de Ahuatepec, municipio de Cuernavaca. Patricia Terroba fue acribillada el 11 de diciembre y cinco días después Ignacio Aguilar fue baleado en la unidad Altitude.