El principal indicador de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registró una caída de 2.56 por ciento en el precio promedio de las acciones que participan en este mercado, la baja más pronunciada en casi un año, desde el 29 de enero de 2009.

Al cierre de la sesión, el Índice de Precios y Cotizaciones quedó colocado en 31 mil 205.30 puntos, 820 unidades abajo de la víspera, con lo cual acumuló un descenso conjunto de 3.93 por ciento durante las últimas tres jornadas.

Con esto, la rentabilidad anual acumulada del mercado de acciones local fue negativa en 2.85 por ciento en las 14 primeras jornadas bursátiles de 2010. Sin embargo, la posición en que cerró ayer el principal indicador colocó la rentabilidad anual de la bolsa mexicana en 60.05 por ciento, desde un nivel de 19 mil 497.10 puntos en que se situaba el 21 de enero de 2009.

El comportamiento del mercado local de valores no refleja el estado actual ni las perspectivas de la economía mexicana. En 2009, durante el peor año de producción en siete décadas y media, los precios de las acciones de empresas inscritas en la BMV tuvieron un incremento de 43.5 por ciento. Su comportamiento parece guardar una mayor relación con las posibilidades de los inversionistas extranjeros de hacer negocios en el país.

Informes del Banco de México revelan que entre junio y diciembre de 2009 se registró un ingreso neto de 2 mil 314.3 millones de dólares al mercado bursátil local, para la compra de acciones de empresas que participan en la BMV. Esos capitales incentivaron la demanda e impulsaron el precio de los títulos a tal grado que el saldo de la inversión de extranjeros en acciones de empresas inscritas en el mercado bursátil mexicano pasó de 105 mil 710.7 millones de dólares en junio, a 134 mil 384 millones en diciembre del año pasado.

El flujo de ese efectivo tuvo que ver, también, con el comportamiento de la paridad entre el peso y el dólar en el mercado local de cambios. El encarecimiento del dólar coincidió con salidas de divisas de no residentes en títulos de renta variable, mientras la revaluación del peso respondió, parcialmente, al ingreso de dólares para la compra de acciones en la BMV, un mercado que se lleva a cabo en moneda nacional.

Ayer el precio del dólar casi alcanzó su máximo nivel en el transcurso de 2010, debido a una mayor demanda de divisas. En las grandes operaciones interbancarias, el dólar se vendió a 12.9275 pesos, muy cerca de los 12.9640 en que se cotizó el 4 de enero, durante la primera jornada cambiaria del año, hasta hoy el mayor precio de la divisa estadunidense en el mercado de cambios local. En la ventanilla de los bancos, el dólar se vendió entre 13.04 y 13.09 pesos.

En las operaciones interbancarias, el precio del dólar se ha mantenido por debajo de los 13 pesos en el transcurso de enero, por una mayor demanda de pesos de inversionistas extranjeros para destinarlos a la compra de bonos del gobierno federal emitidos en moneda nacional. En los primeros 12 días de 2010 ingresaron unos 2 mil 352 millones de dólares con este propósito, según informes del Banco de México.

A una paridad de 13.0820 pesos por divisa estadunidense, la inversión de extranjeros en bonos de la deuda interna del gobierno mexicano se ubicaba en 313 mil 180.7 millones de pesos al término de diciembre de 2009, monto equivalente a 23 mil 939.8 millones de dólares. Al 12 de enero de 2010 los recursos invertidos por extranjeros en bonos gubernamentales se elevaba a 343 mil 958.8 millones de pesos, que a un tipo de cambio de 12.7625 pesos, representaban alrededor de 26 mil 951 millones de dólares.

Esos capitales arriban al país atraídos por una tasa de interés de 4.5 por ciento anual, mayor a la pagadera por instrumentos similares en su país de origen. Los dólares ingresados son convertidos en moneda nacional para comprar los bonos gubernamentales, mientras las divisas recibidas son colocadas en la reserva del banco central. Esta última ascendía a 91 mil 347 millones de dólares el pasado 15 de enero, un nivel histórico.