Ante su bajo salario acuden por comida caliente y a dormir
Viernes 22 de enero de 2010, p. 33
Ante el bajo salario que perciben los trabajadores de la construcción provenientes de otros estados de la República, éstos han transformado los albergues del Gobierno del Distrito Federal en su hogar, adonde acuden al final de su jornada en busca de comida caliente y un lugar para dormir.
Al hacer un balance del programa En frío invierno, calor humano, que arrancó en noviembre de 2009 y concluirá el 28 de febrero de 2010, el titular de la Secretaría de Desarrollo Social capitalina, Marti Batres Guadarrama, detalló que la población que asiste a los siete albergues, fundamentalmente son hombres de edad avanzada, enfermos, en situación de calle, desempleados o con empleos precarios.
“Los trabajadores de la construcción que vienen de Hidalgo –ejemplificó–, se quedan a dormir en los albergues en forma temporal”.
Explicó que de noviembre de 2009 a la fecha se han servido 156 mil cenas en estos lugares, 10 mil más que en la temporada invernal pasada, y todavía no termina enero y falta febrero
.
Entrevistado al término de la entrega de cobijas en Iztapalapa, junto con la titular de esa demarcación, Clara Brugada, el funcionario agregó que esto significa un crecimiento de 12 por ciento en la demanda del servicio.
En el albergue de Coruña teníamos una población de 800 personas hasta el año pasado, y llegó a ser de 900 en los días que se registraron bajas considerables en la temperatura
.
En otro orden, dijo que para 2010 el reto es servir 20 millones de comidas en los comedores comunitarios y públicos, manteniendo el precio de 10 pesos por comida en los primeros, y la gratuidad en los segundos.
Además de la cenas calientes, la Secretaría de Desarrollo Social, por medio del Instituto de Asistencia e Integración Social, ha brindado 55 mil servicios de asistencia, entregado 22 mil cobertores y brindado atención médica a 3 mil 400 personas.
Cada noche, 10 brigadas del instituto recorren las calles del Distrito Federal para invitar a las personas en situación de calle a acudir a los albergues, los cuales tienen capacidad para acoger a mil 400 personas para dormir.