Si bien el entorno económico para 2010 parece apuntar hacia un repunte de la economía mundial, y en especial de la estadunidense (de la que México tiene una fuerte dependencia), todavía existen algunos riesgos que podrían revertir esa tendencia, alertó la iniciativa privada.

El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) advirtió que la mayoría de los programas de gasto impulsados por el gobierno de Barack Obama tendrán su mayor impacto a mediados de año, por lo que si para entonces no han mejorado el perfil financiero del consumidor y los prospectos de inversión privada, la recuperación podría ser de corta duración.

Añadió que si el gobierno de Estados Unidos da por terminados los estímulos fiscales y monetarios que implementó para hacer frente a la crisis, antes de que la economía fortalezca los motores del crecimiento (demanda doméstica y crédito) se corre el riesgo de recaer en una atonía de la actividad económica.

Agregó que el consumidor estadunidense está endeudado y en proceso de desapalancamiento, lo que limita su potencial de consumo, uno de los motores del crecimiento. Aseguró que hasta ahora el repunte de esa economía se debe a la reposición de inventarios, por lo que se debe esperar hasta el fortalecimiento del consumo y de la inversión privada.