En este 2010, en el terreno literario habrá que esperar la respuesta del mercado internacional a los formatos digitales. Por ejemplo, en el país ya se puede adquirir el Kindle, lector electrónico creado por Amazon, pero continúa el debate sobre la digitalización de libros por el gigante Google.

El panorama nacional e internacional de los libros ofreció algunas sorpresas en 2009, como la visita a México de grandes figuras, como Noam Chomsky, invitado por La Jornada con motivo del 25 aniversario de esta casa editorial, Eduardo Galeano y Michel Houellebecq, así como de los premios Nobel Orham Pamuk y Jean-Marie Gustave Le Clézio.

El luto mundial tuvo lugar en mayo, por la muerte del uruguayo Mario Benedetti.

Otro Nobel también fue noticia gracias a la publicación de Gabriel García Márquez. Una vida, biografía escrita por el catedrático británico Gerald Martin. La publicación de este libro levantó polémica, ya que la crítica se centró en la relación de Gabo con el poder, y dejó a un lado la mayor parte de los aspectos de los que trata la biografía tolerada, por ejemplo, su historia como estudiante, la pobreza que lo acompañó buena parte de su vida o el origen de su obra literaria.

También relativo a los Nobel, se anunció el galardón para la escritora rumano-alemana Herta Müller, de quien se acaban de reditar dos novelas en castellano: La bestia del corazón y La piel del zorro, en Ediciones Siruela, que también prepara para este 2010 Todo cuanto tengo lo llevo conmigo, su libro más reciente.

Otras visitas al país fueron las de Noam Chomsky y Eduardo Galeano, cuyas presentaciones en el Palacio de Bellas Artes y la Universidad Nacional Autónoma de México, respectivamente, reunieron a miles de lectores.

Galeano estuvo en el país para presentar su nuevo libro, Espejos, el cual, dijo, es sobre las gentes que hicieron la historia pero que no figuran en ella; también habla de los países que no encuentran en el relato de la historia el lugar que merecen, como Irak. Este libro, que quiere dar la palabra a quienes siempre tuvieron algo que decir, pero fueron condenados a vivir y sobrevivir con la boca cerrada, se ocupa, en diferentes relatos, por ejemplo, de algunas de los excluidos por la historia oficial. Mis amigos de la teología de la liberación se equivocan cuando dicen que son la voz de quienes no tienen voz, porque todos tenemos voz. El problema es que a la inmensa mayoría les han cerrado y les siguen cerrando la boca, pero todos podemos decir algo que merece ser escuchado.

Noam Chomsky ofreció una conferencia en la Sala Nezahualcóyotl. Centró su discurso en el dominio unipolar. El paso de la guerra fría a la guerra contra el narcotráfico, el Estado fallido, los costos del Tratado de Libre Comercio, y la resistencia a las políticas neoliberales.

El 17 de mayo las letras universales perdieron a uno de sus representantes, el escritor uruguayo Mario Benedetti, cuya figura fue recordada también en la Sala Nezahualcóyotl en la voz de quien fue uno de sus grandes amigos, el músico y compositor Daniel Viglietti, quien lo evocó así en una entrevista con La Jornada: Fue un hombre de gran sencillez. Eso no es habitual en los intelectuales, a veces hay mucho narcisismo o como se quiera llamarlo. Además, la coherencia que tuvo... no es el único. Hay muchos en Uruguay, el propio Eduardo Galeano, gran creador y amigo de los dos, capaz de coherencia entre su obra y su vida, pero Mario fue muy calladamente coherente, algo muy impresionante. Hizo una experiencia política en una época y sintió que ese papel no era lo suyo, por más que tenía un compromiso político tremendo, y lo tuvo hasta los últimos días. Siempre pendiente, lo primero que hacía era ver las noticias para ver qué pasaba en el mundo.

También falleció la escritora Corín Tellado, autora de más de 4 mil novelas que vendieron unos 400 millones de ejemplares; en noviembre pasado falleció el poeta Francisco Ayala, a la edad de 103 años, el último sobreviviente de la Generación del 27.

En cuanto a la industria editorial mexicana, se espera que este fin de año haya traído una recuperación en la venta de ejemplares y la facturación, y que el precio promedio de los libros se mantenga en los niveles de principios de 2009.

En la pasada Feria Internacional del Libro de Guadalajara, la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana presentó cifras del desempeño del rubro en los primeros seis meses de 2009, e hizo un comparativo con el mismo periodo en 2008: el decremento en la producción fue de 9 por ciento, el costo de producción aumentó 10 por ciento, y la reducción en ventas fue de 9 por ciento.