De acuerdo con el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), la remodelación de la sala principal del Palacio de Bellas Artes concluirá durante el primer semestre de 2010, justo para festejar el bicentenario de la Independencia.

Entre los trabajos más destacados, se realizó la corrección isóptica, es decir, una adecuación en los distintos niveles del recinto, la cual permitirá una mejora visual y de confort para los espectadores.

Esta intervención contempla las secciones de luneta, anfiteatros y galería. También se construirán antepalcos, que además de retomar el proyecto del arquitecto italiano Adamo Boari, mejorarán de manera notable la acústica de la sala.

El Palacio de Bellas Artes, máximo recinto cultural del país, cerró sus puertas a mediados de 2008 para cambiar la maquinaria teatral original, instalada en 1908, así como la colocación de nuevos sistemas de iluminación y sonido.

Desde su construcción hasta nuestros días han pasado más de 100 años, y sus equipos, que en ese entonces eran los más modernos, se volvieron obsoletos e inseguros. A convocatoria de la Dirección General del INBA se estableció un consejo técnico formado por los funcionarios involucrados en la obra, asistidos por un consejo asesor de especialistas en artes escénicas, escenografía e iluminación.

Como parte de la rehabilitación del inmueble se diseñaron y suministraron butacas, con requerimientos técnicos específicos, para cubrir las condiciones acústicas e isópticas que armonicen con el entorno arquitectónico, y brindar comodidad al espectador.

Asimismo, como responsabilidad histórica y con los asistentes al Palacio de Bellas Artes, se construirá una maqueta a gran escala, documento único que mostrará la ingeniería original propuesta por Adamo Boari y Federico Mariscal, y que será uno de los pocos registros de la evolución del recinto.

Desde el año pasado se desarrollaron varios proyectos ejecutivos, entre ellos la rehabilitación de la concha acústica, la instalación de cableado estructurado y la colocación de un circuito cerrado de televisión y de sistemas contra incendio y de seguridad de bienes y personas.

En el primer semestre de 2010 también se realizará la limpieza del telón Tifanny y del vitral Apolo, así como las respectivas pruebas y afinaciones.

Normas internacionales

Los trabajos de rehabilitación incluyeron el remplazo del sistema de aire acondicionado, centralizado y automatizado, capaz de generar diversas temperaturas y niveles de humedad, específicos para cada sección del edificio, el cual permitirá cubrir las exigencias internacionales para un edificio de estas características.

El aire acondicionado actual cuenta con equipos que datan de 1935, mismo que a lo largo del tiempo se ha adaptado y complementado con equipos más modernos.

Otro proyecto está dirigido a la instalación eléctrica, que debido a su antigüedad representa un riesgo potencial, por lo que se renovará, incluso en las salas de exposiciones y la Manuel M. Ponce.

Respecto del proyecto acústico, éste comprende adecuaciones como el remplazo de las puertas de acceso, las cuales se sustituirán por otras de material reflejante de sonido, así como la colocación de materiales transparentes al sonido en los arcos y la cúpula de la sala, además de la construcción de una estructura no visible al espectador, que permitirá reflejar el sonido de manera uniforme.

Durante su informe de actividades, en noviembre pasado, la directora del INBA, Teresa Vicencio, detalló que la inversión estimada para la restauración del recinto cultural será de 600 millones de pesos, es decir, 50 por ciento más de lo estimado en 2008, que fue de 400 millones.

En los trabajos de restauración de la sala principal del Palacio interviene un consejo asesor integrado por Philippe Amand, especialista en diseño de iluminación; Alejandro Luna, escenógrafo; el músico Horacio Franco, y Jorge Ballina, diseñador escénico, así como otros artistas de distintas disciplinas.

Para no perjudicar a las agrupaciones artísticas que se presentan en el recinto cultural, las autoridades buscaron sedes alternas para continuar con la programación y la calendarización de actividades que se realizan en el Palacio de Bellas Artes.