Mazatlán, Sin., 15 de enero. Pobladores de las seis comunidades afectadas por la construcción de la presa Picachos marcharon del kilómetro 15 de la carretera internacional al palacio municipal de Mazatlán. Pidieron que el gobernador Jesús Aguilar cumpla su compromiso de indemnizarlos y construirles obras públicas como carreteras y sistema de agua potable.

Encabezados por Octavio Atilano y María Alapizco, cientos de mujeres y hombres, adultos y niños, se unieron a la protesta. En el ejido El Venadillo el edil mazatleco Jorge López Sánchez trató una hora de convencerlos de suspender su marcha a cambio de que funcionarios resolvieran la escasez de agua en la comunidad de San Marcos que desde hace ocho días no tiene liquido. La gente coreó: ¡No más promesas!

El edil logró pactar una cita con Gustavo Guerrero, coordinador de Proyectos Especiales del gobierno estatal para revisar los asuntos pendientes.