San Juan del Río, Qro., 14 de enero. El presidente Felipe Calderón Hinojosa aseguró que llegó el momento de cosechar algunos frutos que se sembraron en los momentos difíciles de la crisis económica y prometió que seguirá tomando las decisiones correctas más allá de intereses políticos de corto plazo.

Con el telón de fondo de mayores cargas fiscales y aumentos en gasolinas y otros productos, el michoacano advirtió que en todas las crisis económicas sufre la sociedad, pero también el gobierno en sus ingresos.

En una rápida visita a la entidad, donde inauguró la segunda planta de la empresa Mitsubishi Electric de México, expuso que se evitaron impactos en la población en la crisis de 2009, aunque después reconoció que el inicio de la recuperación no significa que la crisis deje de tener impacto en la gente.

Por el contrario, dijo saber del esfuerzo que hacen millones de familias mexicanas por sacar adelante a los suyos e insistió en el mensaje que ha dado desde el inicio de año, de que ha iniciado la etapa de la recuperación y ahora estamos en tiempo de poder cosechar algunos de esos frutos.

Con ello secundó al gobernador de Querétaro, el priísta José Eduardo Calzada Rovirosa, quien había señalado que los signos de recuperación económica son tangibles en el país y en el estado, ya que continúan las inversiones productivas.

El Presidente defendió su postura de que la crisis de 2009 fue más grave que la de 1995, pero se reconozca o no, las mexicanas y mexicanos trabajamos duro para mitigar sus efectos, en particular en el empleo; y también a pesar de los costos de carácter político que eso implicaría, manejamos con responsabilidad las finanzas públicas.

Fue cuando prometió que tomará las decisiones correctas y trabajará para encontrar soluciones responsables, duraderas más allá de los intereses políticos de corto plazo, que a otros preocupan mucho más.

Por otra parte, al concluir la gira presidencial por Michoacán, el conflicto entre Calderón y el gobernador Leonel Godoy pareció distenderse cuando ambos expresaron en público su satisfacción de inaugurar juntos una planta potabilizadora, cuya construcción estuvo a cargo de Juan Luis Calderón, hermano del mandatario federal y director del organismo operador de agua en el estado.

En la ceremonia, Godoy Rangel declaró: Me da gusto estar hoy nuevamente con el señor Presidente de la República, quien a su vez comentaría: Qué bueno que trabajemos juntos con el gobernador de Michoacán construyendo mejores condiciones de vida para la gente. Como colofón, ambos aparecieron sonrientes frente a los fotógrafos, mientras mostraban vasos del agua potabilizada que recién habían probado.

El cambio de actitud se debió a que Calderón envió al mandatario del sol azteca una carta desde el día 11, en la cual aseguraba que ya había dado instrucciones a sus secretarios de que le informaran a Godoy, con la oportunidad debida, de las giras que realizaran por la entidad, tras la protesta del gobernador.

Aunque en la misiva –que Godoy mantuvo en reserva hasta que hoy reconoció su existencia– el Presidente también le advirtió que desde el inicio de su mandato se planteó la firme decisión de ayudar a Michoacán para que le vaya bien, y por ello instruyó que los programas federales se apliquen a plenitud en el estado.

En el documento justificó la intensa actividad que despliegan los secretarios en la entidad, con el argumento de que buscan la mejora de las condiciones de vida de los michoacanos, pero también ofreció que continuará con esta labor respetando los acuerdos de coordinación con el gobierno del estado.