Viernes 15 de enero de 2010, p. 2
Boston. Los soldados estadunidenses desplegados en Irak que recibieron una inyección de morfina dentro de la hora de producida una herida fueron menos propensos a desarrollar trastorno por estrés postraumático (TEPT), informan investigadores. Las inyecciones del analgésico no garantizan la prevención del TEPT, según el informe publicado en New England Journal of Medicine, pero los hallazgos ayudarían a los médicos a encontrar una mejor forma de prevenir esta debilitante reacción sicológica al combate. No estamos seguros si el efecto es por la reducción del dolor o por un efecto que tiene la morfina sobre la consolidación de los recuerdos en el cerebro inmediatamente después de un episodio traumático o si ambas cosas funcionan juntas
, dijo Troy Lisa Holbrook, del Centro Naval de Investigación en Salud de San Diego.