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El problema no es la tecnología, sino el vacío legal, argumentan

Artistas crean coalición para frenar el tráfico ilegal de obras por Internet
 
Periódico La Jornada
Sábado 9 de enero de 2010, p. 3

“En México se bajan de Internet al año, sin autorización de los titulares de los derechos, más de 4 mil 500 millones de canciones. Significa que el número de canciones bajadas de manera ilegal supera 15 veces el número total de las contenidas en los discos legalmente vendidos durante 2008.

“En cuanto a videos musicales, se bajan ilegalmente más de 700 millones. Las series y películas alcanzan la cifra de más de 350 millones.

Respecto de la creación literaria, la cifra del tráfico de obras es de 28 millones de libros, que incluyen expresiones gráficas, lo que arroja una pérdida de aproximadamente 2 mil 800 millones de pesos.

Por tal situación, entre otras cuestiones, se conformó la Coalición por el Acceso Legal a la Cultura, integrada por 37 sociedades autorales, asociaciones culturales y de promotores, así como algunos sindicatos de música.

Entre sus propósitos se encuentra proteger y defender los derechos de autor, combatir de manera eficaz la piratería y ser una instancia que sirva como interlocutor ante distintas autoridades gubernamentales.

La coalición tendrá como presidentes a Armando Manzanero, Demetrio Bilbatúa, Roberto Gómez Bolaños Chespirito, el escultor Sebastián y el escritor Hernán Lara Zavala.

Como presidente ejecutivo tendrá a Roberto Cantoral Zucchi, representante de la Sociedad de Autores y compositores de México, y como vicepresidente a Fernando Hernández Romero, representante de la Asociación Mexicana de Productores de Fonogramas.

De acuerdo con los principios de dicha asociación, dados a conocer mediante un video, la música, literatura, artes plásticas, cine y teatro “se han convertido en zonas de libre acceso mediante Internet, para que millones de usuarios realicen un tráfico ilegal de cientos de miles de videos, libros, música y arte en general, atropellando los derechos de sus autores y generando malestar social y desempleo.

Ante esa situación se entiende que el problema no son las nuevas tecnologías, sino el vacío que existe en su regulación. Hace falta un marco jurídico para que las ventajas de las innovaciones tecnológicas no sacrifiquen empleos, productividad y los derechos de autor.

Lara Zavala señala que la coalición enfrentará los diversos problemas generados por la piratería, en un mundo empequeñecido y cambiante, donde los usos y costumbres, muchas veces sin mala fe, van por delante de las leyes y la normatividad y perjudican los intereses de quienes viven de la cultura. La coalición, se dijo, permitirá hacer valer los derechos de autores y agremiados, sin menoscabo del público. Se trata de poner un orden que dignifique la labor de los creadores, para que puedan sobrevivir de su trabajo y para que sigan creando.