El blues vive en el Distrito Federal (DF) a pesar de la crisis, de la poca o nula paga a los artistas, de la falta de festivales con figurones como B.B. King, de la desaparición de sitios para oírlo, y tantos otros problemas que le impiden ser negocio. No obstante lo anterior, a los conciertos acuden émulos de los blues men, los cuales quieren el ritmo que es puro sentimiento.

Así lo expresó Arturo Olvera, autor del libro Los festivales de blues en México, en entrevista donde hizo un balance del panorama de este ritmo en México, particularmente en el DF, en 2009. “El año que recién finalizó no estuvo cargado en cuanto a festivales o conciertos; lo que desapareció por un momento fueron los festivales internacionales, pero a nivel nacional sí hubo destellos. Tal es el caso del Festival de Pozos, realizado en Mineral de Pozos, Guanajuato; el Aguablues, que tiene cierto tinte internacional porque se invita a bandas no nacionales. En el Foro Martí del DF se efectuó un festival de blues, donde participaron grupos del país.

Pocos recintos para escuchar esta música

No estamos hablando de un auge, pero sí de la vigencia del blues. En el Foro Martí, que duró unas seis semanas, en cada concierto se reunían alrededor de 300 y 400 personas, entre chavos y adultos. De enero a octubre, en el Paraíso de Izazaga 52 se presentaron cada semana en promedio dos bandas de blues. Aquí también se localiza la sede de la Asociación Mexicana de Blues. Ya es costumbre que los jueves, a partir de las nueve de la noche, estén reunidos ahí los amantes de esta música. Siguen funcionando el Ruta 61; el Hobos, en San Ángel, cuyo nombre hace referencia al termino que denomina a los vagabundos que viajan en trenes y que tocan guitarra y armónica. Ellos fueron el icono del blusero que se gana la vida en los caminos, en las carreteras. Otros sitios son el Nueva Orléans, también en San Ángel; el café Caribe, cerca del Metro CU, pero realmente son pocos. Igual hay festivales pequeñitos, como el que se realiza en Xochitepec, Xochimilco, donde asisten bandas con buen nivel, como los Blues Demon, quienes se hacen acompañar de grupos que llevan muchos años en el ambiente, como Follaje.

La Asociación Mexicana de Blues está presidida por Jorge García, José Luis García Fernández, Mario Martínez, entre otros. La inscripción es gratuita. No se pide amar al blues. Hasta el momento tenemos 15 bandas asociadas y 60 afiliados.

–¿Cómo es el blusero mexicano?

–Es diferente, sencillamente porque la cultura es diferente, así como las circunstancias. Tratamos de imbuirnos en el sentimiento que a los negros les sobra. No cualquiera puede llegar y decirse parte de los blues men.

En 2009 murió Coco Taylor, “una mujer que desde muy joven comenzó en esto del blues. Ella vino en 1979 para participar en el segundo Festival de Blues en México. Su fallecimiento aún duele. En el país no hubo pérdidas que lamentar, pero en la Asociación Mexicana de Blues somos conscientes de la difícil situación de José Cruz, otrora líder de Real de Catorce, quien padece esclerosis múltiple. Hemos ido a sus homenajes y conciertos en su beneficio; estuve con él en la mesa durante la presentación de su libro de poemas, titulado De los textos del alcohol”.

Algunas recomendaciones

Recomendó el libro de Jorge García titulado El camino triste de un música; el disco del grupo La Rambla: Eres tú sólo blues, así como el intitulado Blues with a feeling, de la agrupación Ten con Ten, y El blues nuestro de cada día, de la banda de Hímber Ocampo. Todos estos forman parte de la asociación.

De radio, citó el programa dirigido por Mario Compañet, que se transmite por Radio UNAM  los lunes de cuatro a cinco de la tarde, y que lleva 23 años al aire; el de Raúl de la Rosa, en Horizonte, del IMER, los viernes de ocho a diez de la noche. Aparte informó que la Asociación, por medio de José Luis García, edita actualmente de manera digital la revista Palabra de blues. “Esto dio pie a un programa de radio en la estación Código DF; también se llama Palabra de blues. Debo aclarar que todo esto lo hacemos sin ganar nada de dinero. Es más, nosotros ponemos de nuestro bolsillo.”

Para conseguir el libro de Arturo Olvera entrar a [email protected] o llamar al celular 0445518299872.