Kapalua, Hawai/Las Vegas, 7 de enero. Todo indica que la millonaria contienda entre el filipino Manny Pacquiao y el estadunidense Floyd Mayweather Jr. no se llevará a cabo, al menos no en marzo, aseguró el promotor del isleño, Bob Arum, al no llegar a un acuerdo después de nueve horas de reunión.

Así, el combate, que de acuerdo con los organizadores pudo haber dado hasta 40 millones de dólares a cada peleador, no se efectuará como estaba programado, debido, aparentemente, a la negativa de Pacquiao de someterse a pruebas antidopaje sin previo aviso, como lo hace la Agencia Mundial Antidopaje y como lo exigía el retador estadunidense.

La pelea por el título de peso wélter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) se puso en duda el mes pasado, cuando Mayweather pidió un examen de dopaje al estilo olímpico, lo cual rechazó Pacquiao.

El filipino accedió a que le sacaran sangre para las pruebas poco antes de la pelea e inmediatamente después de la misma, pero no estuvo de acuerdo en que le extrajeran una muestra sanguínea 30 días antes del combate.

Por su parte, Floyd culpó al filipino y a sus representantes de la suspensión: Ellos se niegan a dar a las personas la oportunidad de ver el combate más grande jamás visto. Estoy listo para pelear y firmar el contrato. Manny deja de poner excusas y pelea, señaló, y retó: primero que nada, no sólo quiero pelear con él, yo quiero azotar su trasero.