Jueves 7 de enero de 2010, p. 30
Con gravísimos problemas de violencia
, como la del crimen organizado que ha empeorado la situación
, en México siguen las dificultades para establecer políticas de protección infantil, pues alrededor de 3.6 millones de niños trabaja, de los cuales 42 por ciento (1.5 millones), no asiste a la escuela, establece el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Así, el organismo advierte sobre los déficits que enfrenta nuestro país en su responsabilidad de garantizar los derechos de los niños, para evitar que sean víctimas de violencia, explotación sexual y trabajo infantil.
En la edición especial del informe Estado mundial de la infancia, establece que debido a la problemática de la violencia y a que ha sido duramente golpeado por la crisis económica
, México tiene una tarea triple: abordar las desigualdades que impiden a los niños de las comunidades pobres y marginadas disfrutar de sus derechos, reforzar los sistemas de protección a escala local y nacional.
La región meridional del territorio, alerta, “tiene algunos de los problemas más graves en materia de derechos de la infancia. Allí vive la mayoría de las comunidades indígenas del país –más de 60 grupos étnicos y lingüísticos–, y la mayor parte del 20 por ciento de los mexicanos cuyas condiciones son de extrema pobreza. La violencia perpetrada por la delincuencia organizada ha empeorado la situación”.
Unicef señala que para que el país pueda solucionar estos problemas se requerirán nuevos compromisos y mayores innovaciones
en torno a los derechos del niño. De los 3.6 millones de niños que trabajan, 1.1 millones es menor de 14 años.
En América Latina y el Caribe, establece en el reporte Progreso para la infancia, no sólo se registran las tasas más altas de violencia armada en el mundo sino que 42 por ciento de todos los homicidios a escala mundial corresponden a esta zona
.
La violencia intrafamiliar también está muy extendida. En seis naciones latinoamericanas se identificó que 83 por ciento de los niños entre dos y 14 años fueron sometidos a formas violentas de disciplina y 60 por ciento fue objeto de castigos físicos. El 16 por ciento de las madres y cuidadores consideran que el castigo corporal es necesario para educarlos.
Por otra parte, 11 por ciento de los niños de cinco a 14 años trabajan en esta región, mientras que en todo el mundo hay 150 millones de pequeños que laboran. Los lugares más comunes de trabajo infantil se cuentan las canteras, las minas, plantaciones de café y de caña de azúcar y mercados.