Comandos atacaron ayer casi de manera simultánea el cortejo fúnebre de un empresario sinaloense y a un grupo de personas que lo esperaba en un panteón de Culiacán; el saldo fue de dos muertos y un herido.

Alrededor de las 14 horas, sobre avenida Obregón, a la altura del fraccionamiento Las Ventanas, unos 40 pistoleros que se desplazaban en varias camionetas dispararon contra el cortejo fúnebre de César Ortiz Araujo, –propietario de Tacos San Martín Jr–, quien fue encontrado sin vida el lunes pasado.

Los agresores intentaron levantar a varios de los presentes, entre ellos María de Jesús Ortiz Araujo, hermana del difunto, quien se resistió y forcejeó con los pistoleros, por lo que éstos la balearon.

En medio de la confusión, el féretro fue llevado al estacionamiento de un centro comercial ubicado cerca del lugar del ataque, y ahí permaneció hora y media.

De acuerdo con fuentes policiacas, casi de manera simultánea otro grupo de sicarios atacó a balazos a otras personas que esperaban el cortejo fúnebre en el panteón Jardines de San Martín.

En ese sitio resultó muerto Gabino Elenes Terres, de 34 años, y herido José Ubaldo Tapia López, de 50; varias mujeres y niños que se encontraban en el cementerio salieron ilesos.

También en la capital sinaloense, la policía reportó que en dos agresiones de criminales fallecieron Luis Miguel Báez y Juan Carlos Rangel; a este último los agresores intentaron levantarlo, pero como se resistió lo mataron.

En el municipio serrano de Choix, limítrofe con Chihuahua, un grupo de militares que realizaban un operativo en la comunidad de San Vicente se enfrentaron contra delincuentes. En el tiroteo murieron el soldado Jaime Estuardo de la Rosa y un pistolero.

Aparte de los seis homicidios en Sinaloa, el crimen organizado ultimó a 22 personas en Chihuahua, Baja California, Sonora, Guerrero y Zacatecas.

Diez de estos asesinatos fueron perpetrados en Chihuahua, siete de ellos en Ciudad Juárez; dos en el municipio de Balleza, donde un comando mató a un hombre que salía de un funeral y levantó a otro que lo acompañaba, al que minutos después ultimó y calcinó en una camioneta.

La primer víctima fue identificada como Ever Loya Caballero, sobrino del comandante de Seguridad Pública de Balleza, Leoncio Loya. El último homicidio en territorio chihuahuense se cometió en el municipio de Meoquí.

En ese contexto, el general Felipe de Jesús Espitia, encargado del Operativo Conjunto Chihuahua, declaró que en 2010 se agudizarán las disputas entre cárteles del narcotráfico en Ciudad Juárez, donde el año pasado fueron ejecutadas 2 mil 658 personas.

Ello se debe a “que está por entrar un periodo electoral, lo que hará más complicado frenar a los cárteles”, aseveró luego de asistir a un acto oficial. El próximo 4 de julio en Chihuahua se elegirán gobernador, diputados locales y alcaldes.

De los 12 crímenes restantes, cinco se perpetraron en Baja California –entre ellos el de una mujer y un hombre que fue decapitado–, cuatro en Sonora, dos en Guerrero y uno en Zacatecas, donde la víctima fue degollada.

En Morelia, Michoacán, dos grupos de hombres armados, vestidos como policías federales, levantaron a tres personas, una de ellas identificada como Francisco Romero Medina.

La Secretaría de Seguridad Pública de Nuevo León informó que tres elementos de la dependencia –cuyos nombres no proporcionó– se encuentran desaparecidos desde hace 12 días, por lo que la Procuraduría de Justicia del estado ya abrió una investigación.

Por otro lado, el secretario de Seguridad Pública de Guerrero, general Heriberto Salinas, informó que en 2009 hubo 50 ataques contra corporaciones policiacas de la entidad, y que de los mil 436 asesinatos ocurridos en ese periodo 843 estuvieron relacionados con el crimen organizado.

Javier Valdez, Rubén Villalpando, Antonio Heras, Ulises Gutiérrez, Alfredo Valadez, Ernesto Martínez, David Carrizales, Sergio Ocampo y AFP