Se disputarán 11 gubernaturas; se pudieran realizar elecciones en otras dos entidades
Domingo 3 de enero de 2010, p. 8
La crisis económica, el reciente incremento de impuestos, la inseguridad y los presuntos vínculos entre el crimen organizado y actores políticos son elementos que deberán tomar en cuenta los partidos al elegir a los candidatos que contenderán este año por 11 gubernaturas, cantidad que podría llegar a 13 si se ajustan los tiempos comiciales.
Si los priístas confían en que la inercia de las pasadas votaciones federales –en las que obtuvieron la mayoría en la Cámara de Diputados y todas las gubernaturas disputadas– se repitirá en 2010, los panistas apuestan a que se hagan buenos los pronósticos sobre un crecimiento de 3 por ciento en la economía nacional y a que la lucha contra el crimen organizado atraiga avances al gobierno de Felipe Calderón con el fin de evitar una nueva caída y ganar, al menos, en los estados que gobiernan.
Asimismo, el Partido Acción Nacional (PAN) ha echado a andar una estrategia electoral que busca corregir los errores cometidos en julio pasado.
Una de las prioridades de los panistas es mantener la unidad interna en la elección de abanderados, pues saben que la división en su seno fue una de las causas de su debacle.
Por esa razón, el dirigente nacional, César Nava, se reúne con presidentes de comités estatales y aspirantes a cargos. El objetivo de los encuentros es consensuar el método de selección de candidatos y garantizar equidad.
Voto de castigo
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) espera que los resolutivos de su pasada asamblea nacional le permitan evitar conflictos en la elección de candidatos.
También apuesta a que la sociedad castigue
a panistas y priístas por haber apoyado el incremento a gasolinas, diesel y energía eléctrica, así como al IVA e ISR, entre otros impuestos, para mantener Zacatecas y sumar algún estado más.
Tamaulipas, Chihuahua y Sinaloa son algunas de las entidades en las que habrá cambio de gobernador y en las que existe mayor violencia vinculada con el crimen organizado.
No obstante, los gobernadores de esas entidades, priístas los tres, adelantan desde ahora carro completo
. Lo hacen en medio de denuncias sobre presunta infiltración del narcotráfico en las estructuras electorales, policiacas e incluso en el Poder Ejecutivo de esos estados.
Guerrero, donde también habrá elecciones –se espera que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) señale que sean en 2010, y no en 2011–, no escapa a esas denuncias ni a los enfrentamientos entre bandas, así como de los grupos criminales contra policías federales y el Ejército.
En Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, ex alcalde panista de Reynosa, es uno de los aspirantes del blanquiazul al que mayores posibilidades se otorgan en la lucha por la candidatura al gobierno estatal. Pero también es a quien más se menciona por presunta relación con miembros del cártel del Golfo. A estos señalamientos se suman otros que lo vinculan con los hijos de Marta Sahagún.
En tanto, el priísta Jesús Vizcarra Calderón, presidente municipal de Culiacán y aspirante a la gubernatura de Sinaloa, tampoco escapa a señalamientos de que tiene vínculos con grupos del crimen organizado.
En ninguno de los casos las versiones se han demostrado, pero aseveraciones como éstas se multiplican, con mayor o menor repercusión en los medios de comunicación, en diversas entidades y en todos los partidos.
Frente a ese fenómeno, las dirigencias partidistas han resuelto convocar a los aspirantes a revisarse
y procurar no participar en la contienda si tienen algún pendiente con la justicia, luego de advertir que no ejercen funciones de Ministerio Público.
En Guerrero, que gobierna el perredista Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, el sol azteca perfila como aspirantes a Armando Ríos Piter, actual diputado federal, cercano al gobernador y a la dirigencia perredista, así como al senador Lázaro Mazón Alonso, quien acompañó a Andrés Manuel López Obrador en su gira por todos los municipios de la entidad.
A esos posibles abanderados debe sumarse Luis Walton Aburto, senador por Convergencia, partido que junto al PT busca recuperar la alianza de las izquierdas y proponer un solo candidato en cada proceso electoral.
El tricolor se inclina por Manuel Añorve Baños, actual presidente municipal de Acapulco, quien ganó la alcaldía en una contienda en la que también participó Walton Aburto.
De Añorve es conocida su cercanía con el coordinador de los senadores priístas, Manlio Fabio Beltrones, y su amistad con la dirigente nacional de su partido, Beatriz Paredes, quien le asignó una de las vicecoordinaciones de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados durante la legislatura de la que también formó parte Felipe Calderón.
En Chihuahua, que gobierna el priísta José Reyes Baeza Terrazas, cuyo mandato culmina el 2 de octubre de 2010, el tricolor tiene como aspirantes a César Horacio Duarte Jáquez, líder de la Liga de Comunidades Agrarias y ex presidente de la Cámara de Diputados federal; a Óscar Villalobos Chávez, ex secretario de Fomento Social; a José Reyes Freís, presidente municipal de Ciudad Juárez, y al diputado Héctor Murgia, entre otros.
Por el PAN son mencionados Javier Corral Jurado, diputado federal, quien participó en el proceso anterior; Carlos Marcelino Borruel Baquera, presidente municipal de Chihuahua; los senadores Ramón Galindo y María Teresa Ortuño, y Juan Blanco Saldívar, ex alcalde de la capital.
Hace seis años, el PRI no sólo conservó la gubernatura, sino que le ganó al PAN la mayoría en el Congreso local y en las 67 presidencias municipales, entre ellas Ciudad Juárez, Parral, Camargo y Ojinaga, consideradas bastiones del blanquiazul en las últimas décadas.
Para Sinaloa, que gobierna el priísta Jesús Aguilar Padilla, hasta el 31 de diciembre se perfilaban por el tricolor Jesús Vizcarra Calderón, presidente municipal de Culiacán, y el senador Mario López Valdéz, quien en fórmula con Francisco Labastida obtuvo para su partido una de las votaciones más altas hace tres años.
Por el PAN se menciona a los diputados Manuel Clouthier Carrillo y Yudit del Rincón Castro, así como a la senadora María Serrano y al ex diputado Carlos Eduardo Felton.
Por el PRD se habla del dirigente Camilo Valenzuela, de José Ángel Pescador Osuna y de Juan Guerra. En las pasadas elecciones el PRI ganó con un pequeño margen al PAN, que denunció fraude electoral.
Por Tamaulipas, que encabeza el priísta Eugenio Hernández Flores, cuya gestión finaliza el 3 de marzo de 2011, son mencionados por el tricolor José Manuel Assad Montelongo, secretario de Educación del estado, y Manuel Muñoz Cano, titular de Desarrollo Social de la entidad.
Los panistas perfilan a Ángel Sierra Ramírez, director general de Fondo Nacional de Empresas Sociales, y a José Julián Sacramento Garza, senador.
Otros panistas nombrados son Luis Alonso Mejía, ex diputado federal, y la senadora Lázara Nelly González Aguilar. Hace seis años el PRI ganó la gubernatura con una amplia ventaja.
En Puebla, los priístas perfilan a Javier López Zavala, secretario de Desarrollo Social. También se habla del diputado federal Alberto Amador Leal y de la alcaldesa de la capital, Blanca Alcalá Ruiz.
En el PAN se prevé una fuerte contienda entre los senadores Rafael Moreno Valle, cercano a la lideresa del SNTE, y Humberto Aguilar Coronado, así como Ana Teresa Aranda, ex subsecretaria de Población de la Secretaría de Gobernación.
Además de Guerrero, se prevé que la SCJN adelante las votaciones en Quintana Roo, con lo cual el nuevo gobernador –se espera que repita el PRI– sería electo en julio de 2010, pero rendiría protesta el 5 de abril de 2011, nueve meses después de los comicios.