Fuentes oficiales confirmaron que entre el 31 de diciembre y el primero de enero el crimen organizado perpetró 55 asesinatos, 20 de ellos en Chihuahua, incluidos 12 en Ciudad Juárez, que cerró el año con 2 mil 658 homicidios, incluidos los de cuatro militares, 32 estadunidenses, 60 policías, 125 menores y 164 mujeres, además de 23 decapitados y 168 enviados a la fosa común.

Así, en dos años, la cifra de personas ultimadas en la urbe fronteriza se elevó a 4 mil 314, con las mil 656 ejecutadas en 2008 –45 de ellas encontradas en dos narcofosas–, debido a la guerra entre los cárteles de Sinaloa y Juárez, conforme al recuento elaborado con información oficial, más cuatro asesinatos del primer día de 2010.

Entre los últimos casos reportados en 2009 figura el de un sujeto que fue baleado y calcinado cerca del kilómetro 29 de la carretera a Casas Grandes, y el de la niña Arely Estrada Peralta, de cuatro años, asesinada junto a su padre, Antonio Estrada Torres, de 25.

En tanto, pese al Operativo Conjunto Michoacán, el crimen organizado perpetró el año pasado 608 ejecuciones en la entidad, seis de ellas el 31 de diciembre. Cuatro fueron resultado de un enfrentamiento entre dos grupos criminales antagónicos en el municipio de Tancítaro, donde las autoridades locales dimitieron por las amenazas recibidas.

Las otras dos víctimas –un hombre y una mujer– fueron decapitadas y sus cadáveres aparecieron en San Juan de los Plátanos, en los límites de los municipios de Buenavista y Apatzingán, con señales de tortura y un mensaje donde Los Zetas reivindican los crímenes.

De las 55 ejecuciones confirmadas entre jueves y viernes, 11 más fueron cometidas en Durango; seis de ellas la madrugada del 31 de diciembre por hombres armados que irrumpieron en el billar Buchacas, ubicado en Gómez Palacio, Durango. Las víctimas fueron sacadas del establecimiento y más tarde sus cadáveres aparecieron acribillados.

Además de ellos, otros cuatro sujetos perdieron la vida en la misma localidad lagunera el miércoles 30 de diciembre por la tarde durante una balacera entre bandas antagónicas, pero las autoridades confirmaron el hecho un día después.

En Durango también, Ramón Javier Sánchez Acosta ingresó el jueves al hospital municipal de El Oro con heridas de bala. Era atendido de urgencia cuando lo remató una cuadrilla de pistoleros que irrumpió en el establecimiento y ordenó retirarse a los médicos, con la amenaza de que si no lo hacían serían ultimados. Uno de los médicos resultó herido al tratar de proteger al paciente.

En Sinaloa ocho personas murieron baleadas en varios municipios, entre ellas el comandante Jesús Manuel Escalante Leyva, de 44 años, jefe de Investigaciones de la Policía Ministerial en la zona norte, quien había sobrevivido a un atentado perpetrado el 5 de julio de 2008 en el municipio de Guasave.

El directivo policial falleció frente a la base de la corporación en Los Mochis, municipio de Ahome, luego de que desconocidos lo balearan dentro de su patrulla alrededor de las 23:30 horas del miércoles en la esquina de Benjamín Hill y Río Fuerte, colonia Scally, confirmaron fuentes oficiales el jueves 31.

Robo en instalaciones de la Secretaría de Hacienda

La madrugada del mismo día, en Culiacán, hombres armados robaron cinco vehículos incautados por fuerzas federales que permanecían bajo custodia de una empresa de seguridad privada en una bodega del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes de la Secretaría de Hacienda.

Los cadáveres de dos personas calcinadas aparecieron el jueves dentro de un vehículo en inmediaciones de la comunidad de Gabriel Leyva, municipio de Salvador Alvarado; y a pocos metros, policías locales encontraron un trozo de un acta de nacimiento a nombre de Florinda Serrano, de Santa María, Nayarit.

En la clínica 20 del Instituto Mexicano del Seguro Social en Tijuana, Baja California, murió un hombre baleado, en tanto la víspera de Año Nuevo en una casa del fraccionamiento Los Ángeles, delegación de La Mesa –donde la policía encontró una metralleta–, fueron ultimados a balazos Juvencio Martínez Rocha, Adrián Ruiz Martínez y Alberto Martínez Ruiz, junto a una mujer aún desconocida.

Por último, la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil de Guerrero confirmó que al menos cinco personas fueron ejecutadas el mismo día, una en el municipio de Tecpan y dos en Petatlán. Dos más fueron asesinadas en sus domicilios: Germán Pérez Lozano, de 22 años, en Acapulco, y Rutilio Campos Rodríguez, de 50, en la comunidad de Potoichan, Copanatoyac.

Rubén Villalpando, Saúl Maldonado, Javier Valdez, Antonio Heras y Sergio Ocampo.

Con información de Homero Lemus/La Jornada Michoacán