Nueva York, 1º de enero. Los basquetbolistas Gilbert Arenas y Javaris Crittenton, de Wizards de Washington de la NBA, se amenazaron con pistolas durante un altercado en los vestuarios, ocurrido en la Nochebuena por una deuda de apuestas, informó el periódico The New York Post.

El cotidiano, al citar fuentes anónimas, informó en su edición de este viernes que el altercado estalló cuando Crittenton se disgustó porque Arenas no quiso pagar una deuda de apuestas.

Arenas habría apuntado con un arma a Crittenton, quien también tomó una pistola, indicaron fuentes de seguridad de la NBA al rotativo.

Cuando el Post le preguntó sobre la confrontación, Arenas negó haberle apuntado a Crittenton con un arma.

Esto no tiene precedentes en la historia del deporte, dijo Billy Hunter, director general del Sindicato de Jugadores, citado también por el diario neoyorquino: Nunca he escuchado que los jugadores se amenacen con pistolas en un vestuario.

El equipo de Wizards informó que Arenas había almacenado armas descargadas en una caja en su casillero dentro del estadio y que la NBA investigaba la situación.

El pasado martes, la policía de Washington, DC, indicó que investigaba un reporte de que las pistolas fueron halladas dentro de un casillero en el Verizon Center.

Ahora las autoridades federales estarían indagando el caso. Ben Friedman, vocero de la oficina del secretario de Justicia en el Distrito de Columbia, expuso a The Washington Post: Trabajamos con el Departamento Metropolitano de Policía en la investigación.

En un comunicado, los Wizards habían aclarado que Arenas había guardado las armas, pero que no tenía municiones en el casillero y que de eso lo notificaron a las autoridades y a la NBA.

Arenas argumentó al Washington Post que llevó las armas luego del nacimiento de su hija Hamiley Penny, este mes, y afirmó que las entregó al equipo de seguridad del Verizon Center para que se las diera a la policía: “No las habría traído de haber sabido las reglas. Cuando nació mi hija pensé ‘ya no las necesito’”.

Arenas fue suspendido del encuentro inaugural de la temporada 2004 por portar un arma sin registro cuando vivía en California, en 2003.

De acuerdo con el convenio colectivo de la liga estadunidense de basquetbol, a los jugadores se les permite poseer armas legalmente, pero se les prohíbe tenerlas en las instalaciones de la NBA.