Teherán, 30 de diciembre. Mirhosein Musavi y Mahdi Karubi, los líderes de la oposición al presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, habrían abandonado este miércoles la capital hacia una ciudad del norte del país, en medio de manifestaciones organizadas por el propio gobierno frente a las protestas antigubernamentales del pasado domingo.

La agencia oficial Irna informó que ambos líderes reformistas huyeron de Teherán luego de comprobar el aumento de la ira del pueblo que exige se les castigue por incendiar la tensión en Irán después de las votaciones (presidenciales de junio).

No obstante, Hosein, hijo de Karubi, desmintió la información en el sitio Internet de su padre, Sahamnews, y sostuvo que esta noche lo vio en Teherán. Algunos intentan crear un clima de miedo y terror con informaciones sobre el arresto o el exilio (de mi padre) para presionarlo, indicó.

El sitio de la oposición Rahesabz, por su parte, dio una explicación diferente y aseguró que miembros de los Guardianes de la Revolución y del Ministerio de Inteligencia llevaron a Musavi y a Karubi a la ciudad de Kelar-Abad para protegerlos de la ira de la población.

Cientos de miles de iraníes, millones según la prensa oficial, se manifestaron este miércoles en todo el país para respaldar al gobierno con cánticos y lemas favorables al régimen y al guía supremo iraní, el ayatola Alí Jamenei, y hostiles a la oposición, a la que prometieron destruir, según las imágenes mostradas por los canales de la televisión estatal.

En las calles de Teherán arremetieron contra el ex primer ministro Mirhosein Musavi y el ex presidente reformista del Parlamento Mehdi Karubi, así como contra el ex presidente Akbar Hachemi Rafsanjani, que conserva posiciones importantes en la cúpula del régimen, pero al que se acusa de estar demasiado cerca de los opositores.

El régimen iraní respondió así a las manifestaciones antigubernamentales del domingo por todo el país, al tiempo que el presidente Mahmud Ahmadinejad criticó nuevamente a los dirigentes occidentales que denunciaron la represión de las protestas de la oposición. Le aconsejo a (el presidente Barak) Obama y a ciertos dirigentes europeos que aprendan las lecciones de sus antecesores y no crean que pueden dividir al pueblo iraní haciendo escándalo, declaró.

Al mismo tiempo, el procurador general iraní, Gholamhossein Mohseni Ejeie, anunció en el Parlamento que se iniciarán diligencias contra Musavi, Karubi y otros jefes de la rebelión no identificados, mientras la policía advirtió que las autoridades adoptarán una postura más dura si se realizan nuevas manifestaciones ilegales.

En Ginebra, la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, se declaró horrorizada por los hechos de violencia que se desencadenaron durante las demostraciones del domingo, y que dejaron ocho muertos, según cifras oficiales.

Si bien, dijo, las circunstancias sobre las muertes aún no están claras, algunos informes sugieren que se utilizó violencia excesiva de las fuerzas de seguridad y de los paramilitares de las milicias islámicas progubernamentales Basij.

Italia pidió convocar a todas los embajadores iraníes en Europa, en protesta por la represión a manifestaciones opositoras en Irán, e indicó que hay un importante acuerdo de la diplomacia europea con Estados Unidos para coordinar una postura conjunta a partir de los primeros días de 2010.

Contrariamente, Venezuela criticó los intentos de desestabilización promovidos por Estados Unidos en Irán.

En este contexto, Irán y Kazajastán desmintieron un supuesto pacto para proveer de mil 350 toneladas de uranio purificado Kazajo a Teherán, que consideró que este tipo de informaciones forman parte de la propaganda al servicio de los objetivos políticos de las potencias opresoras que actúan contra este país.