No existen elementos jurídicos para que el Gobierno del Distrito Federal (GDF) vete las reformas al Código Civil, mediante las cuales se legaliza el matrimonio entre personas del mismo sexo, quienes incluso podrán adoptar, aprobadas el lunes por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), afirmó la consejera jurídica, Leticia Bonifaz.

En entrevista puntualizó que los argumentos que se dan no caben dentro del ámbito de lo jurídico, y por razones políticas el Gobierno del Distrito Federal no puede vetar una iniciativa.

Bonifaz amplió que en el caso de la adopción se revisó junto con los diputados locales que no se violara lo dispuesto en las convenciones y tratados internacionales que hay sobre los derechos de los niños y las niñas, respecto de su identidad y filiación.

La autorización otorgada en la capital del país para contraer matrimonio entre personas del mismo sexo recibió el respaldo de legisladores federales de PRI, PAN y PRD.

Manlio Fabio Beltrones (PRI) consideró que la determinación de la Asamblea Legislativa es de avanzada y garantiza la salvaguarda de los derechos humanos. Gabriela Cuevas (PAN) dijo que la decisión busca mayor igualdad de derechos entre los capitalinos, y Enoé Uranga (PRD) se sumó a esas posturas al señalar que la aprobación tiene que ver con las garantías de cualquier persona.

En el gobierno federal, el titular de Salud, José Angel Córdova expresó: Qué bueno que haya respeto para todas las personas. Apuntó que en los servicios de salud se atiende a todos sin distinción y particularmente en el Seguro Popular, donde se afilia a las personas y no nos interesa conocer su preferencia sexual.

En el Senado, la decisión de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal también Tomás Torres (PRD) y Rosario Ibarra (PT) aplaudieron la decisión.

Las dirigencias nacionales del PRD y PT respaldaron a los diputados de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal por la aprobación de reformas al Código Civil local.

De esta forma, dijo el PRD, la Asamblea Legislativa se erige como una institución democrática y depositaria de la Constitución y del Estado laico.

También en un comunicado, el partido Convergencia respaldó a los legisladores locales del DF por su coherencia para promover cambios legales en favor de los derechos humanos y evitar cualquier forma de discriminación.

El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del DF, Luis González Placencia, hizo un llamado a las voces, como la de la Iglesia católica, que se oponen al matrimonio y la adopción por parejas de un mismo sexo, a evitar los discursos incendiarios que impliquen discriminación hacia otras personas, que a su vez pueden llevar a la violencia física.

Panistas rechazan la adopción de niños por uniones homosexuales

Es inmoral: iglesias

R. Garduño, A. Becerril, M. Pérez, V. Ballinas y G. Saldierna

Las fracciones de PAN, PRI y PVEM en la Asamblea Legislativa tienen aseguradas 19 de las 22 firmas que se necesitan para presentar una acción de inconstitucionalidad en contra de las reformas al Código Civil del Distrito Federal, por las cuales se permite el matrimonio entre personas del mismo sexo con derecho a la adopción de hijos.

De acuerdo con la coordinadora del PAN en la ALDF, Mariana Gómez del Campo, se cabildea con otros integrantes de la bancada del PRI para obtener las tres firmas faltantes.

La panista fue entrevistada afuera de la sede del Gobierno del Distrito Federal, a donde acudió junto con diputados de PRI y PVEM para entregar una carta al jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, en la que le pide que vete dichas modificaciones legales.

Gómez del Campo dijo que tienen un plazo de 30 días para impugnar ante la Corte la reforma al Código Civil.

Hasta el momento, las firmas seguras son las 15 del grupo parlamentario del PAN; tres del Partido Verde –Raúl Nava, Alberto Couttolenc y Norberto Solís–, además de los priístas Emiliano Cruz y Octavio West.

En su escrito, los diputados inconformes aseguran que la reforma aprobada el lunes pasado por la mayoría perredista en la ALDF es una ley plagada de vicios, tanto en su contenido como en su procedimiento, y hacen saber al mandatario local que incluso fue aprobada al vapor y sin la participación de expertos, y mucho menos la posibilidad de que la ciudadanía pudiera opinar mediante un referéndum.

El documento de dos cuartillas detalla que la citada modificación al Código Civil carece de toda fundamentación y no se respetó la normatividad durante el procedimiento de aprobación.

En el Senado, el panista Guillermo Tamborrel Suárez, presidente de la Comisión de Grupos Vulnerables, exigió a la Asamblea Legislativa no permitir que los matrimonios de personas del mismo sexo puedan adoptar hijos. En ese sentido se manifestó su correligionario, el senador Felipe González, quien dijo que es un tema que su partido debe frenar.

El presidente de la Cofraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas, Arturo Fabela Gutiérrez, calificó de pecado el matrimonio entre dos personas del mismo sexo. Acusó que los asambleístas engañaron y sorprendieron a los capitalinos al aprobar dicha unión.

La arquidiócesis de Puebla dijo que no se puede legalizar esas uniones porque es ofuscar valores fundamentales que pertenecen al patrimonio común de la humanidad.

La aprobación de la adopción de niños por las uniones gay es una práctica inmoral que se opone al principio reconocido por la Convención Internacional de la ONU sobre los Derechos del Niño, según el cual el interés superior es proteger al infante.

El obispo de Ecatepec, Onésimo Cepeda, consideró una estupidez y una aberración los matrimonios gays.