Teherán, 21 de septiembre. Cientos de miles de personas dieron el último adiós hoy al gran ayatola disidente iraní Hossein Alí Montazeri, durante el funeral realizado en la ciudad sagrada de Qom, al sur de esta capital, y que se vio opacado por enfrentamientos entre los partidarios del clérigo y la policía.

Los dolientes, cuyo número se ubicó en casi un millón, de acuerdo con el diario The Independent, salieron en lo que fue denominado un día nacional de duelo y acompañaron los restos de Montazeri hasta el mausoleo de Masumeh, importante santuario del islam chiíta iraní, donde fueron inhumados en presencia de religiosos notables.

Los dirigentes de la oposición Mirhossein Mousavi y Mehdi Karoubi estuvieron presentes en la ceremonia en la que la multitud lanzó consignas contra el presidente Mahmud Ahmadinejad al que llamaron dictador, tras su cuestionada relección el pasado 12 de junio.

La televisión estatal controlada por el gobierno únicamente emitió breves reportes sobre las exequias y a varias publicaciones liberales así como al periódico Parlemannews les fue prohibida su presencia en Qom.

La prensa extranjera fue impedida también de cubrir los funerales del ayatola.

Los enfrentamientos se produjeron cuando las fuerzas del orden trataron de dispersar a varios grupos que gritaban consignas contra el gobierno, delante de la casa del difunto, de acuerdo con el sitio de Internet de la oposición Kaleme.org, el cual agregó que luego del funeral fue atacado el automóvil del dirigente opositor Mousavi.

Parlemannews, en su edición digital dijo haber recibido información de disparos al aire y uso de gases lacrimógenos, sin dar más detalles.

El gran ayatola Hossein Alí Montazeri, quien falleció el pasado sábado a los 87 años de edad, era considerado el patrón espiritual de un movimiento opositor que floreció luego de la relección de Ahamdinejad y que ha resistido todos los intentos por sofocarlo, según algunos analistas.