El Instituto Federal Electoral (IFE) realizará en 2010 estudios de factibilidad técnica y viabilidad jurídica de la urna electrónica, lo cual podría derivar en su utilización –como parte de un proyecto piloto– en los comicios federales de 2012.

Para tal efecto se conformó ya una comisión especial de consejeros que coordinará los trabajos de análisis y recogerá las experiencias nacionales e internacionales en ese tipo de urnas para decidir sobre su uso en 2012.

El presidente de dicha comisión, Marco Antonio Baños, informó que en los estudios se involucrará a las universidades e institu- ciones educativas más prestigiadas del país, y posteriormente el IFE definirá su viabilidad.

Sin embargo, advirtió que esta nueva experiencia lleva implícita la necesidad de impulsar cambios en el ámbito legal y en el proceso de capacitación de los funcionarios de casilla. Señaló que en el estudio deberán revisarse las formas en que se procesaría el cómputo de los votos emitidos en urnas electrónicas, pues evidente- mente sería distinto respecto al esquema actual.

Habría menos dudas

El proyecto tiene apoyo del presidente del IFE, Leonardo Valdés, quien considera que la votación electrónica contribuye a despejar algunas preocupaciones centrales de las democracias, como la instantanei- dad de los resultados electorales para disminuir las dudas de los partidos y de los ciudadanos.

Asimismo, señaló que permitiría dar mayor transparencia en el cómputo de sufragios mediante las auditorías que se pueden realizar a su utilización. Dijo que en las experiencias internacionales se ha demostrado que la votación electrónica garantiza la confidencialidad del voto.

Por su parte, Baños advirtió que deberán ponderarse los beneficios de usar dicho instrumento en términos del procesamiento de los sufragios, ya que en las condiciones actuales este paso implica alrededor de dos horas, en tanto que la urna electrónica permitiría reducirlo a 5 minutos. Asimismo –dijo–, reduciría la posibilidad de inconsistencias en el recuento de votos, lo cual sería otra ventaja.

Señaló que una de las consideraciones más importantes tendrá que ser el aspecto presupuestal, porque implicará una inversión importante del IFE. Señaló que en algunas experiencias internacionales el costo de este tipo de urnas se ha logrado abaratar hasta 300 dólares, pero en una primera fase usada en Jalisco, costo 45 mil pesos, aunque luego se redujo a 23 mil.