Jueves 17 de diciembre de 2009, p. 36
Grupos ambientalistas presentes en la cumbre sobre cambio climático hicieron un pronunciamiento conjunto en el que consideraron que el gobierno mexicano debe aplicar medidas para destinar de forma equitativa y diferenciada, al menos uno por ciento del PIB anual a la adaptación y mitigación de los efectos y que quede estipulado dentro del Presupuesto de Egresos de la Federación.
Oxfam-México, Greenpeace, Presencia Ciudadana, Heinrich Böll Siftung, México, Centroamérica y el Caribe propusieron reducir y retirar paulatinamente aquellos subsidios que propicien el aumento de las emisiones, como el aplicado a los combustibles fósiles (gasolina) y generar incentivos e instrumentos de política pública, adecuados y eficaces, para la reducción de emisiones en los principales sectores contaminantes, como el transporte, la generación de energía y establecimiento de programas de ahorro energético, evitando la pérdida de los bosques, selvas y biodiversidad.
Asimismo propusieron desarrollar un plan nacional de adaptación que considere no sólo la reducción del riesgo de los impactos del cambio climático, sino también la erradicación de la pobreza, la equidad de género, el respeto a los derechos y tradiciones de los indígenas, entre otros. Otra propuesta fue prohibir la producción de agrocombustibles cuando compitan con la dinámica de producción de alimentos, así como modificar la política forestal.