La mitad de empresas que firmaron las normas sobre mensajes para niños no las cumplen: Conar
Reitera Cofepris negativa a signar el PABI; propondrá reforma a reglamento sanitario en la materia
Miércoles 16 de diciembre de 2009, p. 37
El país vive una emergencia de salud a causa del sobrepeso y la obesidad, que afectan a 70 por ciento de los adultos y 30 por ciento de los niños. Sin embargo, después de un año de aplicación del Código de Autorregulación de Publicidad de Alimentos y Bebidas dirigida al público infantil (PABI) los avances son mínimos y ni siquiera se pudieron cuantificar.
Aunque según Raúl Rodríguez, presidente del Consejo Nacional de Autorregulación y Ética Publicitaria (Conar), es de gran relevancia la voluntad de la industria de coadyuvar con el gobierno federal en el abatimiento del exceso de peso corporal que afecta a los mexicanos, apenas 18 de las 30 empresas que firmaron el código participaron en los cursos de capacitación sobre publicidad que se impartieron durante el año, y al menos la mitad incumplió los compromisos establecidos en el acuerdo.
Miguel Ángel Toscano, titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), reiteró su negativa a suscribir el codigo e informó que como parte de la estrategia nacional de nutrición –que desde hace meses se espera que sea presentada por el presidente Felipe Calderón–, propondrá una reforma al reglamento sanitario de publicidad.
Contra mensajes engañosos y suplementos alimentarios
Dijo que el objetivo es que el nuevo ordenamiento entre en vigor en 2010 y con ello se contribuya a erradicar los mensajes engañosos, entre ellos los dirigidos al público infantil, así como los de suplementos alimentarios.
Al presentar el informe sobre el primer año de funcionamiento del código PABI, Raúl Rodríguez reconoció que carece de datos sobre la cantidad de anuncios que se transmiten en medios de comunicación o sobre cuántos cumplieron con el acuerdo de autorregulación. Tampoco se midió el impacto que tuvieron en el cambio de actitud del público hacia hábitos saludables.
En conferencia de prensa conjunta entre la Secretaría de Salud (Ssa), Cofepris, la Procuraduría Federal de Protección al Consumidor (Profeco) y la industria de alimentos procesados, funcionarios y empresarios reconocieron que no se obtuvo información cuantitativa debido a la falta de acuerdo de lo que es un mensaje dirigido a la infancia.
Además de que los datos presentados corresponden sólo al primer semestre del año, señalaron que el código es impreciso y omite en su redacción conceptos rectores clave que propiciaron interpretaciones heterogéneas de las partes. Otras deficiencias consisten en la falta de claridad y precisión en la redacción de algunos artículos.
El reporte leído por Rodríguez se basó en un texto elaborado en noviembre, el cual plantea que habrá una nueva versión del código PABI, la cual entraría en vigor en diciembre de 2009. Ayer solamente se comentó que el nuevo texto está en proceso y que en febrero habrá un informe completo sobre los anuncios de publicidad dirigidos a los niños.
En relación con las empresas firmantes del código, Rodríguez mencionó que empezó con 19 y hasta el primer semestre del año sumaban 30, las cuales participan en 90 por ciento de la pauta publicitaria. Sin embargo, no han signado el acuerdo empresas de comida rápida como McDonald’s, Kentucky Fried Chicken y Pizza Hut. Apenas el lunes se adhirieron Domino’s Pizza y Burger King.