Por lo menos no nos enfrentamos con España en la primera ronda, bromeó Javier Aguirre, quien se definió como un hombre bicultural al recibir la Gran Cruz de la Orden del Mérito por mandato del rey Juan Carlos I, anoche en un acto con el que inició la despedida de su gestión el embajador Carmelo Angulo, en su residencia. Y si nos llegáramos a encontrar, sé que dominará la cultura deportiva que promueve el juego limpio y la fraternidad entre nuestros equipos nacionales, dijo El Vasco Aguirre, quien compartió la distinción con el empresario pesquero Antonio Álvarez, inmigrante español. En el acto, el embajador destacó la labor del hoy técnico nacional en su paso por el futbol español y mexicano desde la etapa de jugador. Aguirre, acompañado de su esposa Silvia, señaló que orgullosamente pertenezco a las dos naciones que me han forjado; México y España me han nutrido de lo que soy, y por ello, el que España me otorgue esta distinción y se me entregue en estas tierras mexicanas, es para mí la conjunción de una trayectoria en la que he intentado, aquí y allá, honrar a estos dos países que quiero tanto, añadió.